Los presupuestos 2015 serán los de la recuperación si hacemos caso a las palabras del ministro de Hacienda durante su presentación. Unas cuentas generales marcadas por las elecciones que han llevado a un excesivo optimismo a la hora de calcular los ingresos que obtendrá el estado. Un incremento del 5,4% a pesar de la aplicación […]
Dirigentes Digital
| 03 nov 2014
Los presupuestos 2015 serán los de la recuperación si hacemos caso a las palabras del ministro de Hacienda durante su presentación. Unas cuentas generales marcadas por las elecciones que han llevado a un excesivo optimismo a la hora de calcular los ingresos que obtendrá el estado. Un incremento del 5,4% a pesar de la aplicación de una reforma fiscal que se estima recorte alrededor de 6.000 millones de ingresos.
En este contexto, el turismo también ha visto aumentar la partida destinada a la promoción de estas actividades. En el libro amarillo de 2015 donde se marcan las partidas presupuestarias se fija en 323,02 millones de euros la cantidad destinada para la promoción turística. Una cifra que supera a la del año pasado en un 2,8% cuando se destinaron 313,96 millones. A pesar de que sube respecto a este ejercicio lo que es cierto es que la cantidad destinada es menor que en 2013 cuando la dotación para la promoción del turismo fue de 330,62 millones de euros, un 2,2% menos.
Si se compara con los datos de antes de la crisis, la diferencia es ostensiblemente mayor. Los presupuestos de 2008 fueron elaborados en 2007 cuando la crisis era una realidad en Estados Unidos pero en España todavía se miraba a esta situación como algo ajeno. Por ello, son quizá las cuentas más optimistas de los últimos años. En ellos, se destinó para la promoción turística 360,25 millones lo que representa un 10% más de la cifra anterior.
Importancia del sector
A pesar de que la partida destinada a la promoción turística está lejos de las cantidades de bonanza, sí que en estos presupuestos se dedican palabras halagadoras al sector. "La actividad turística es clave para la economía de nuestro país ya que supone más de un 10,9% del PIB, aporta alrededor del 12% del empleo y mitiga el desequilibrio de nuestra balanza comercial", apuntan. A lo que añaden que el turismo ha de ser apuesta "prioritaria" por su liderazgo mundial, por su carácter transversal y tractor en la economía y por constituir un elemento fundamental de la estrategia de acción exterior.
Sin embargo, no todo son loas y el Gobierno también apunta retos dentro de este texto. "No es menos cierto sin embargo, que en la actualidad, estamos asistiendo a toda una serie de transformaciones que, unidas al fuerte desarrollo de las nuevas tecnologías, están alterando la cadena de valor, los procesos de comercialización y venta y el propio comportamiento de los consumidores, en un mercado en el que confluyen cada vez más segmentos de turistas potenciales y en el que compiten cada vez más destinos internacionales", aseguran al hablar de la competencia.
¿Las recetas? Más o menos las de siempre. Mejorar la competitividad la competitividad de sus empresas y destinos, la diferenciación de su oferta y la captación de nuevos segmentos en mercados emergentes.