Lo que parecía un mero trámite para CVC tras presentar la oferta más elevada por Deoleo, se puede convertir en un auténtico quebradero de cabeza. La CNMV ha recogido el guante de los
accionistas minoritarios, que se quedaron como mero espectadores cuando los principales accionistas de la compañía aceptaron la oferta de 0,38 euros por acción.
A ese precio el pasado mes de abril, la entidad británica adquirió el 29,9% de la compañía que estaba en manos de Bankia, BMN y la cooperativa Dcoop. A la vez llegó a un acuerdo temporal con
CaixaBank, CajaSur Banco, Unicaja Banco, el minoritario Daniel Klein y Dcoop para comprar otro 25,61% al mismo precio.
Con esta operación, CVC no estaba obligada a lanzar una OPA hasta que no rebasara el 30% del capital, pero facilitar la exclusión en bolsa de las acciones, planteó la oferta a 0,38 euros.
La CNMV admitió a trámite la OPA pero todavía no ha dado el visto bueno a la operación después de tres meses, algo inusual en estos tipos de trámites. Incluso ha expirado los seis a los que se habían comprometido los principales accionistas que permanecen en Deoleo a la espera de la aprobación. Ahora podrán vender su participación a terceros hasta que se clarifique la operación.
La CNMV quiere forzar al fondo británico a que eleve su oferta, tal como piden los minoritarios. En este sentido, el organismo presidido por Elvira Rodríguez no puede obligar a mejorar la OPA, pero si está presionando para que suceda. CVC puede mantener su oferta pero se arriesga a que los inversores no acudan a la oferta. Por lo menos, CaixaBank, CajaSur Banco, Unicaja Banco, el minoritario Daniel Klein y Dcoop ya tiene libertad para vender su participación a un tercero.