El gigante bancario alemán venderá su participación del 19,99% en esta entidad al PICC Property and Casualty por entre 23.000 y 25.700 millones de yuanes y 25,7 millones de yuanes, según el tipo de cambio. La transacción, que todavía debe ser aprobada por los reguladores, tendrá un "impacto financiero positivo", según Deutsche Bank. La entidad germana entró […]
Dirigentes Digital
| 28 dic 2015
El gigante bancario alemán venderá su participación del 19,99% en esta entidad al PICC Property and Casualty por entre 23.000 y 25.700 millones de yuanes y 25,7 millones de yuanes, según el tipo de cambio. La transacción, que todavía debe ser aprobada por los reguladores, tendrá un "impacto financiero positivo", según Deutsche Bank.
La entidad germana entró en el capital de Hua Xia en 2006, aumentando posteriormente su posición en 2008 y 2011. Sin embargo, a principios de este año anunció que ya no consideraba esta participación como "estratégica". Deutsche Bank está a punto de cerrar uno de sus peores años de su historia. En el tercer trimestre registró 6.000 millones de pérdidas y anunció un recorte de plantilla de 23.000 empleos.
La entidad china tampoco ha aportado en este ejercicio fortaleza en el balance de la entidad alemana. Deutsche tuvo que provisionar 649 millones de euros por el deterioro de su participación, ya que el banco chino perdió unos 6.000 millones de euros.
Años de exceso
Deutsche Bank está pagando los excesos de años de ser uno de los principales responsables de alimentar la burbuja financiera. Aunque no está señalado por el BCE, el año pasado se vio obligado a realizar una ampliación de capital de 8.500 millones para superar las pruebas de resistencia.
Las cuentas del banco están sufriendo millonarias pérdidas por el deterioro de sus activos y las sanciones que está recibiendo. Algunos analistas apuntan a que su exposición derivados ascienden a más de 65.000 millones de euros, lo que podría hacer tumbar al gigante alemán en cualquier turbulencia bursátil.
Además, Deutsche Bank está asediado por las autoridades. En solo tres años el mayor banco europeo se ha gastado 7.000 millones de euros en el pago de abogados y gastos judiciales por las irregularidades y litigios en los que está envuelto. El último pacto judicial le ha costado 2,5 millones por manipular productos financieros en Estados Unidos. Pero todavía tiene frentes abiertos que hacer engordar la factura.