La intención de la empresa, cuyo fundador, Porfirio González, ha achacado su situación de insolvencia a la larga crisis del sector, auspiciada por la irrupción de la fotografía digital y la actitud de la banca ante el endeudamiento derivado de las inversiones realizadas para adaptarse al nuevo contexto, pasa por aprobar un plan de pagos […]
Dirigentes Digital
| 14 jul 2014
La intención de la empresa, cuyo fundador, Porfirio González, ha achacado su situación de insolvencia a la larga crisis del sector, auspiciada por la irrupción de la fotografía digital y la actitud de la banca ante el endeudamiento derivado de las inversiones realizadas para adaptarse al nuevo contexto, pasa por aprobar un plan de pagos con una importante quita y continuar con la actividad.
"Nos han cerrado de golpe las pólizas de descuento por 4,5 millones en los últimos meses y eso ha sido la puntilla tras haberlo intentado todo", ha declarado González.
Y es que en apenas cinco años, la cadena de tiendas, que llegó a contar con cerca de 300 establecimientos (entre propios y franquiciados), ha visto como su plantilla se ha reducido en casi un 60% debido al desplome experimentado en las ventas, que, en pleno auge de la fotografía digital, han caído desde los 80 millones de euros de 2009 hasta los 40 registrados en el último ejercicio.
En su demanda de solicitud de concurso, la empresa ha declarado una deuda acumulada de 12 millones de euros. Entre los acreedores más afectados, la banca figura en primer lugar, especialmente BBVA, Popular, Sabadell, Bankinter y Deutsche Bank, mientras que la Agencia Tributaria y la Seguridad Social, con préstamos de 2,5 y 0,5 millones de euros respectivamente, también están implicadas.