El Banco Central Europeo (BCE) ha conseguido restar protagonismo a la preocupación sobre un posible impago en Grecia que hoy a impactado muy negativamente a la Bolsa de Atenas, así como la desazón por los últimos datos de crecimiento chino a un ritmo más lento de lo esperado. La jornada comenzaba con la primera estimación […]
Dirigentes Digital
| 15 abr 2015
El Banco Central Europeo (BCE) ha conseguido restar protagonismo a la preocupación sobre un posible impago en Grecia que hoy a impactado muy negativamente a la Bolsa de Atenas, así como la desazón por los últimos datos de crecimiento chino a un ritmo más lento de lo esperado.
La jornada comenzaba con la primera estimación del PIB de China, que se desaceleró hasta niveles del 7%, desde el 7,3% previo. Se trata del nivel más bajo en seis años. "Por un lado, algunos datos de coyuntura anticipaban una moderación incluso mayor; por otro, lo cierto es que confirma los pronósticos de que el principal motor de crecimiento mundial durante buena parte de la crisis ahora se enfrenta a importantes retos (e incertidumbres para el resto de las economías)", explica José Luis Martínez Campuzano, estratega de Citi en España.
Advierte este experto, no obstante, que estos datos "tampoco son tan negativos; los de marzo (producción industrial y ventas minoristas por debajo de lo esperado), sí lo son. De hecho, el indicador de sorpresas económicas en China ya está en terreno negativo. Un desplome inquietante. Aunque más interesante el comportamiento alcista de los mercados financieros anticipando nuevas medidas expansivas que no acaban de llegar".
Recordemos que el martes el Fondo Monetario Internacional (FMI) anticipaba que la economía del gigante asiático podía moderar su ritmo de crecimiento este año hasta niveles del 6,8%, desde el 7,4% de 2014 y el 7,8% de 2013. De hecho, para 2016 estima un incremento del 6,3%. Es más, fuentes oficiales del país han fijado el repunte objetivo para 2015 en el 6%.
Por su parte, el Banco Central Europeo (BCE), ha mantenido sin cambios ni en los tipos de interés ni tampoco en la política monetaria, pues las compras masivas de deuda (QE) apenas tienen un mes de vida. Su presidente, Mario Draghi, ha reiterado que el programa durará al menos hasta septiembre de 2016, mostrándose sorprendido por las especulaciones de una "salida temprana", al tiempo que ha señalado que existen "claras evidencias de su efectividad".
Mientras tanto, el reloj sigue corriendo para Atenas que cada vez tiene una situación de liquidez más comprometida. Se acerca la fecha "límite" para llegar a un acuerdo con sus socios/acreedores sobre su plan de reformas que debería ser validado por el Eurogrupo el próximo 24 de abril, para que reciba los 7.200 millones pendientes de su rescate. Entre mayo y junio, la república helena debe hacer frente a vencimientos de 2.500 millones con el FMI y a un importe similar en pagos de pensiones y sueldos de funcionarios.
Finalmente, en otros mercados el euro, presionado a la baja, se cruza en los 1,05 dólares; y el petróleo sigue con su remontada particular y el Brent alcanza ya los 60 dólares, mientras el West Texas cotiza en niveles de 55.