No cabe duda. La buena racha que desde hace meses acumula el Tesoro en sus emisiones demuestra que el apetito por la deuda española sigue en forma a pesar de la caída en las rentabilidades ofrecidas a los inversores. Tras la primera emisión de 1.000 millones de euros en bonos a 50 años realizada esta […]
Dirigentes Digital
| 05 sep 2014
No cabe duda. La buena racha que desde hace meses acumula el Tesoro en sus emisiones demuestra que el apetito por la deuda española sigue en forma a pesar de la caída en las rentabilidades ofrecidas a los inversores. Tras la primera emisión de 1.000 millones de euros en bonos a 50 años realizada esta semana, el mercado volvió a comprobar ayer el apetito por los activos de largo plazo nacionales.
El Tesoro emitió 3.007 millones de euros en bonos a 10 y 30 años, cumpliendo ampliamente el objetivo marcado en el rango de 2.000 / 3.000 millones de euros y aunque el ratio de sobredemanda fue inferior que en emisiones anteriores (1,8 veces frente a las 2,1 de la subasta anterior en el caso del papel a 10 años), la colocación volvió a realizarse a un coste mínimo.
Pero, ¿quién está comprando deuda española y cómo ha cambiado el panorama en los últimos años? Que los inversores extranjeros son el gran sustento de este mercado no es ninguna novedad. Pero sí sorprende la evolución de este ratio en los últimos tiempos. Según los últimos datos del Tesoro correspondientes al mes de julio, la deuda pública en manos de no residentes (en cartera registradas) subió hasta los 272.000 millones de euros, desde los 268.150 millones del mes anterior. Como recuerdan los analistas de Citi, "es la más elevada de la serie histórica y supone el 42,65 % del total".
A cierre de 2013, la cifra se situaba en 221.614 millones de euros. Es decir, los inversores extranjeros tienen ahora 46.536 millones de euros más de deuda española en sus carteras. Sin contar con la adquirida durante el mes de agosto, que ampliaría las cifras a juzgar por el éxito de las últimas colocaciones.
Pero las cifras son más sorprendentes si se comparan con años anteriores. A cierre de 2012, los no residentes mantenían 191.614 millones de euros en deuda española, lo que entonces suponía un 36% del total.
Los fondos de inversión son otro segmento que también ha apostado claramente por este tipo de activo en los últimos años. En julio sumaron 2.600 millones de euros hasta los 36.450 millones, lo que supone un 5,72% del total. Una cifra que se acerca al entorno de 40.000 millones que estas instituciones alcanzaron de máximo en 2001, cuando suponían un 18,2% del total.
Por lo que respecta a la cartera en manos de las entidades financieras, la deuda nacional cayó en julio hasta los 189.360 millones de euros, desde los 195.450 millones del mes anterior. Actualmente representa un 29,7 % del total.
La noticia positiva de este proceso es que desde el comienzo del año, el Tesoro ha captado 104.347 millones de euros dentro del programa de financiación regular a medio y largo plazo, lo que supone el 80,7% de la previsión de emisión incluida en la estrategia para 2014.