El escándalo mexicano de OHL

Por el momento, el escándalo de México ya se ha cobrado alguna víctima en su filial mexicana. Pablo Wallentin dimitió esta semana como directivo de la compañía en Mexico para no entorpecer la investigación. Y puede que no sea la última dado que el grupo ha encargado una auditoría para analizar lo sucedido y depurar responsabilidades. 

Mientras tanto en el mercado, la acción de la empresa se desplomó un 9% dentro del Ibex 35 el día que se conoció este tema, aunque en las jornadas siguientes mejoró su comportamiento.Poreviamente, las primeras consecuencias las sufrió la filial del mercado centroamericano que se desplomó hasta un 12% antes de que el regulador la suspendiera. Tras este hecho, las consecuencias se sintieron en el mercado español donde las acciones de la empresa terminaron la jornada con una caída del 9,1%. Una bajada que ha conseguido frenarse en las sesiones posteriores en las que incluso los títulos de la empresa han repuntado.

"Parece que por ahora el mercado no lo está penalizando mucho", apuntaba Adrián Payo, analista de XTB, que comentaba que el mercado se muestra a la espera de que se conozca cómo se esclarece el tema. Payo añade que lo que sí habría penalizado a la empresa hubiera sido una posible venta. Unos rumores que este pasado lunes negó la compañía al asegurar que no existían conversaciones para vender esta filial. En este sentido, Abertis era la compañía a la que apuntaban como posible comprador y esta también negó que existieran estas conversaciones. 

Desde OHL, preguntados por DIRIGENTES sobre cómo afectará este escándalo a su negocio, se remiten a los hechos relevantes enviados y a la nota de prensa lanzada con motivo de la petición de auditoria. No quieren entrar a valorar cómo afectará a esto al que en su plan estratégico se enmarcaba como primer mercado objetivo del grupo. 

¿Qué pasa con México? 

El vicepresidente del grupo Josep Piqué apuntó durante la presentación del plan estratégico del grupo para los próximos cinco años que OHL se centraría en mercados que denominaban , aquellos que en palabras del directivo la compañía se sentía "como en casa". Así la apuesta es por ocho mercados: Canadá, Estados Unidos, México, Colombia, Perú y Chile son junto con España y Europa del Este las ocho regiones donde el grupo centrará la actividad. Entre los que destacó, México que se presentaba como el que será el principal mercado del grupo dado que se reducirá el porcentaje que representa España en el total.

Ahora el escándalo de la filial del grupo podría poner en problemas conseguir este objetivo. Por lo que el grupo ha querido cortar con este problema encargando una auditoría con el objeto de sobre la actuación de OHL México en el desarrollo del contrato de concesión del Viaducto Bicentenario, así como "aportar conocimiento y seguridad a cuantas instituciones se relacionan con su filial mexicana". 

Además, los resultados de la compañía conocidos esta semana se han visto lastrados por el comportamiento de las concesionarias mexicanas. Un dato que no hace otra cosa que echar leña al fuego. Las dudas sobre México siguen ahí y el mercado espera ver cuál será el siguiente movimiento del grupo empresarial. Por el momento, la agencia Moody’s ya se ha pronunciado y ha puesto en revisión la nota de OHL. 

La posible rebaja el ráting ‘B1‘ de la compañía se basa en la posibilidad del impacto que tendrán las supuestas irregularidades en la contratación por parte de OHL México del viaducto del Bicentenario. Moody’s explicaba en una nota que la fuerte caída del precio de las acciones de su filial mexicana pone en peligro que pueda hacer frente a la cobertura de un préstamo de 300 millones de euros.