El diéselgate de Volkswagen puso bajo sospecha a todo el sector y destapó todas las debilidades que afronta el sector, como los nuevos competidores y la adaptación de la industria a las exigencias medioambientales. Después de trucaje de la marca germana han ido saltando otros escándalos a otros fabricantes como Renault y el último ha […]
Dirigentes Digital
| 03 jun 2016
El diéselgate de Volkswagen puso bajo sospecha a todo el sector y destapó todas las debilidades que afronta el sector, como los nuevos competidores y la adaptación de la industria a las exigencias medioambientales. Después de trucaje de la marca germana han ido saltando otros escándalos a otros fabricantes como Renault y el último ha afectado a las marcas asiáticas con los problemas del principal proveedor de airbags japonés.
Pese a todos los baches por el camino, los valores europeos han vuelto a las carteras de los inversores. Hasta febrero con las investigaciones alrededor de Renault, devolvieron al sector a nuevos mínimos anuales. Pero desde mínimos del año pasado, Volkswagen se ha revalorizado más de un 30%, Renault otro tanto.
La mejora del sector está viniendo por la mejora de la marca alemana. Volkswagen ha recuperado el segundo puesto por capitalización bursátil hasta los 76.400 millones de dólares superando a Daimler, fabricante de Mercedes. La crisis de los motores hizo a la marca alemana perder el primer puesto a favor de Toyota que alcanza los 174.000 millones de dólares.
JP Morgan señala que está preparada para afrontar el impacto del escándalo. El consenso de mercado ya estima que en 2017 recuperará el trono de los beneficios del sector europeo. Los analistas prevén que el próximo año ganará 10.300 millones de euros por encima de cualquier fabricante europeo.
