Chávez murió de cáncer el 5 de marzo de 2013, y desde entonces, todo ha cambiado en Venezuela. Salvando las distancias entre el mandatario y su sucesor, Nicolás Maduro, la sombra de Chávez es alargada, y a más de uno les parece que lo suficiente como para haber llevado a Maduro al poder, pero parece, […]
Dirigentes Digital
| 05 mar 2015
Chávez murió de cáncer el 5 de marzo de 2013, y desde entonces, todo ha cambiado en Venezuela. Salvando las distancias entre el mandatario y su sucesor, Nicolás Maduro, la sombra de Chávez es alargada, y a más de uno les parece que lo suficiente como para haber llevado a Maduro al poder, pero parece, que el líder podría estar quedándose sin cobijo.
El Chavismo y Maduro se juegan este año su futuro en unas cruciales elecciones legislativas ante una oposición dividida y dispuesta a recurrir a la ‘baza’ de la profunda crisis económica por la que atraviesa el país.
Venezuela está sumida ahora en un ambiente de mayor crispación política y problemas económicos agudizados por la caída de los precios petroleros. Apenas el 20% de venezolanos aprueba la gestión de su actual presidente, algo que no es de extrañar teniendo en cuenta que en 2013 la economía del país creció un 5,6%, mientras que en 2014, cayó un 2,4%.
Lo mismo ocurre con la inflación, liderada por Venezuela a nivel planetario. En los últimos días se supo que en enero los precios se habían superado en un 10%, cuando ya en 2014 la cifra final del 68% asustó hasta el más optimista. ¿En qué cifra dejó Chávez la inflación al morir? En 2012 marcó 20,3% y al año siguiente, se fue hasta el 56,2%. Unas cifras que crecen al mismo ritmo que la escasez y el desabastecimiento, que tanto castiga a una población obligada a hacer colas durante horas para llenar su cesta de la compra.
Y por si esto fuera poco, Venezuela está también a la cabeza en cuanto al índice de pobreza. Al llegar el líder bolivariano al Palacio de Miraflores, se encontró con que el 45% de sus compatriotas vivía por debajo de la línea de la pobreza. Hoy, tras aplicar sus planes sociales, esa misma línea está más alta: 48,4% de la población.
En resumen, los dos años de gestión de Maduro, quien continuó con el modelo socialista de controles y de planificación centralizada, se caracterizan por el empeoramiento de datos económicos y sociales clave como inflación, devaluación, reservas internacionales, déficit fiscal o pobreza, respecto a los que dejó Chávez.
Crisis del petróleo
La caída de los precios del crudo tampoco ayuda a mejorar el panorama del país latinoamericano. Bien es cierto que Chávez gobernó en tiempos de abundancia petrolera, lo que es mucho más fácil, pero Maduro no parece estar tomando ninguna medida extraordinaria para evitar que el precio del barril siga bajando, y lo que es más importante, para evitar que la economía venezolana continúe hundiéndose. En 2013, el precio del barril de referencia eran 100 dólares, mientras que estos últimos días, no llega a los 50.
Oposición
Poco resolutivo frente a la crisis, Maduro parece ser mucho más ‘lanzado’ a la hora de ‘debatir’ con sus opositores políticos. En febrero Maduro denunció un supuesto intento de golpe de Estado encabezado por un grupo de oficiales de la Fuerza Aérea, el cual, dijo, contó con el apoyo de Estados Unidos.
La oposición por su parte, no tardó en denunciar que Maduro lanzó una ofensiva contra estos sectores políticos, deteniendo el 19 de febrero al alcalde de Caracas, Antonio Ledezma, bajo acusación de conspiración contra el gobierno.
Ledezma fue encarcelado en la misma prisión donde está recluido el opositor Leopoldo López, acusado por instigación durante las protestas que tuvieron lugar el 12 de febrero del año pasado. Ese día, la manifestación convocada en el centro de Caracas, además de daños materiales, dejó tres muertos y dio paso a una ola de protestas y manifestaciones en contra del Gobierno, que durante el primer semestre de 2014 dejó 43 fallecidos.
Además de Ledezma y López, Daniel Ceballos, ex alcalde de la occidental San Cristóbal y miembro del partido de López, también está en la cárcel. Fue el 19 de marzo del año pasado en Caracas cuando el Servicio Bolivariano de Inteligencia lo arrestó después de que un tribunal de la zona ordenara su detención por "rebelión civil" y "agavillamiento".