El Ejército continúa su persecución contra el teniente Luis Gonzalo Segura. Después de haber sufrido un último arresto preventivo de 30 días, ahora se enfrenta a la posibilidad de una nueva sanción. Segura lleva desde hace un tiempo denunciando que en la Fuerzas Armadas se producen casos de corrupción, que existe una caja B y […]
Dirigentes Digital
| 27 may 2015
El Ejército continúa su persecución contra el teniente Luis Gonzalo Segura. Después de haber sufrido un último arresto preventivo de 30 días, ahora se enfrenta a la posibilidad de una nueva sanción. Segura lleva desde hace un tiempo denunciando que en la Fuerzas Armadas se producen casos de corrupción, que existe una caja B y que es necesaria una auditoría externa para que los ciudadanos puedan ver lo que ocurre con el dinero público. Tras doce años en el Ejército, ha publicado Un paso al frente, una obra donde se combina la realidad y la ficción para denunciar la falta de transparencia del Ejército y los posibles casos de corrupción.
– ¿Cómo se encuentra, señor Segura?
– Estoy desorientado, la verdad. Estoy esperando una orden de expulsión del Ejército que supuestamente iba a firmar en breve el ministro de Defensa (Pedro Morenés). El caso es que todavía no la ha firmado. Yo creo que entre el caso de denuncia de Zaida y que es año electoral, no tiene intención de hacerlo.
– Sí, todos nos acordamos del caso de la capitán del Ejército de Tierra Zaida Cantera, que denunció a su superior ante las Fuerzas Armadas por acoso sexual y laboral. ¿Cree que hay más casos, como el de Zaida y como el que ha denunciado usted, que están a la sombra por miedo a salir a la luz?
– Sí, sí, por supuesto. Yo tengo una lista de diez personas que quieren denunciar, pero los poderes del Ejército y el control del Gobierno en muchos medios de comunicación hacen que sea muy difícil denunciar.
– ¿Cuándo fue la última vez que estuvo detenido?
– Estuve encerrado desde el 15 de enero al 5 de marzo por decir que yo no intervendría en Cataluña. Hice esta declaración como respuesta a las afirmaciones de la Asociación de Militares Españoles (AME), que dijeron a finales de diciembre que los ‘separatistas catalanes’ están yendo demasiado lejos en sus ‘ofensas a los representantes de las Fuerzas Armadas’, y que sus aires de independencia podrían obligar al Ejército a intervenir. Además, dijeron que los daños colaterales serían mínimos. Es decir, dijeron muchas aberraciones y yo respondía que si el Ejército intervenía en Cataluña, yo me daría de baja del mismo. Pues por eso, consideraron una falta al Ejército, y me encerraron. Además, me sancionaron por no presentarme otro día que me avisaron por correo electrónico por la tarde para que me presentara al día siguiente, cuando, en primer lugar, entre la citación y la vista deben pasar obligatoriamente 48 horas, y yo esa tarde había cogido un ferry para Ceuta, porque mi abogado vive allí. Y, además de todo esto, anteriormente me encerraron 30 días por la entrevista que di para vosotros. Me citaron el 5 de noviembre de 2014 y yo estaba enfermo, y como vieron la entrevista publicada el día 6, pensaron que no me había presentado por hacer la entrevista con vosotros.
– Pero la entrevista la hicimos el día 4 de noviembre…
– Sí, sí, eso les dije, pero ellos dijeron que no. Además, es muy curioso todo esto, porque se basan en un informe remitido por el Centro de Seguridad del Ejército de Tierra (CESEGET), los servicios de inteligencia del Ejército, que se supone que prueban que yo estaba haciendo la entrevista con vosotros el día 5. ¿Cómo es posible? Y, sin embargo, esa prueba nunca la han llegado a mostrar. Porque no existe. Pero aún así, el arresto preventivo se hace.
– ¿Por qué cree que el Ejército le está persiguiendo de esta manera?
– Es una cuestión ideológica. Están teniendo una forma de actuar autoritaria y pseudofascista. No les gusta la gente que denuncia todo lo que tienen montado: un ‘tinglado’ de corrupción y abusos muy grande.
– ¿Sabe usted más cosas ‘oscuras’ sobre el Ejército que no haya contado todavía?
– Sí, sé más, y todo saldrá a la luz en un nuevo libro, "Código Rojo", que saldrá publicado en junio. Es otra perspectiva sobre lo que denuncio.
– Algún medio recientemente ha publicado noticias vinculándole con partidos políticos, y han afirmado que usted sólo busca notoriedad pública. ¿Qué opina?
– Es una opinión más. Acepto las críticas, aunque no esté de acuerdo con ellas. Eso sí, hasta un punto. Concretamente, El Confidencial me ha tachado de acosador sexual, de machista… En fin, la querella que he presentado contra este medio ha sido admitida a trámite. No obstante, yo respeto a todos los partidos, y si me invitan a que asista a actos que fomenten la democracia en las Fuerzas Armadas, yo asistiré siempre encantado. Si el PP me invitara, también iría.