Por Virginia Hidalgo, multiempresaria, consultora estratégica y formadora de marketing y ventas
Virginia Hidalgo
| 16 may 2024
La forma de vender y hacer transacciones ha cambiado mucho en las últimas décadas. Sin lugar a dudas estamos en la era digital de las empresas, pero, ¿por qué deberíamos tener un negocio online?
Una de las principales ventajas de comercializar en Internet es la capacidad de alcanzar un mercado globalizado. Las tiendas físicas están limitadas geográficamente, sin embargo, un negocio en línea es visitado por innumerables posibles clientes con conexión a Internet en cualquier momento del día. Esto no solo amplía los potenciales compradores, sino que también permite la operación continua, 24/7, maximizando las oportunidades de venta sin estar atados a los horarios comerciales tradicionales.
Operar en línea reduce significativamente los costos fijos asociados con los negocios tradicionales. No se necesita alquilar un espacio concreto y muchos de los procesos pueden ser automatizados para reducir la necesidad de personal. Esto permite que se invierta mucho más en mejorar el producto o servicio y en marketing para atraer una mayor clientela.
Las herramientas de automatización se encargan de las tareas repetitivas permitiendo que los empresarios se concentren en aspectos estratégicos del negocio. Dispositivos como CRM y plataformas de automatización de marketing ayudan a gestionar relaciones con los clientes, seguimientos de ventas y campañas de marketing de forma más eficiente.
Las plataformas de analítica web como Google Analytics proporcionan a las empresas un mayor y mejor entendimiento sobre cómo se comportan sus clientes. Saber de dónde vienen, qué páginas visitan más y cómo interactúan en Internet beneficia la optimización de las estrategias de marketing y la experiencia del usuario para aumentar así las conversiones.
Desde el acceso a un mercado más amplio hasta la reducción de costos operativos, las ventajas son cuantiosas. Además, la disponibilidad de herramientas avanzadas de marketing y tecnología de automatización facilitan a los negocios en línea operar con una eficiencia que era inimaginable en la era predigital. Al aprovechar todos estos elementos, cualquier entidad puede no solo sobrevivir, sino también prosperar en el competitivo mercado de hoy en día.