Un reciente informe del Observatorio de Responsabilidad Social Corporativa, una ONG impulsada por el Ministerio de Trabajo, indicaba que solo una de las empresas que componen el Ibex 35, las compañías españolas con mayor capitalización bursátil, no tiene presencia en territorios offshore. El resto, invariablemente en el sector en el que operen, cuenta con filiales […]
Dirigentes Digital
| 08 sep 2015
Un reciente informe del Observatorio de Responsabilidad Social Corporativa, una ONG impulsada por el Ministerio de Trabajo, indicaba que solo una de las empresas que componen el Ibex 35, las compañías españolas con mayor capitalización bursátil, no tiene presencia en territorios offshore. El resto, invariablemente en el sector en el que operen, cuenta con filiales en paraísos fiscales, de la que suelen colgar otras compañías. Un caso de manual es el de Ebro Foods, utilizando territorios tan populares para la evasión fiscal, como Holanda y el pequeño estado de Delaware en Estados Unidos.
Cada vez la comunidad internacional es más restrictiva para considerar un país como paraíso fiscal. De hecho, cada año se reduce la lista "negra" de Estados opacos fruto de tratados y acuerdos para abrir sus secretos financieros. La OCDE solo considera como tales las pequeñas islas de Oceanía de Niue y Nauru y la Comisión Europea los eleva a 30 por no tener tratados de cooperación e información financiera. Sin embargo, para instituciones como Tax Justice Network, que aplican criterios mucho más duros, otros muchos territorios mantienen prácticas propias de paraísos fiscales, es decir, un sistema tributario laxo y fuertes restricciones en información de las empresas radicadas en el país, como es el caso de Holanda.
El sándwich holandés
Ebro Foods entró en Holanda cuando adquirió el negocio arrocero de Deoleo, antigua SOS, en 2010. En el paquete entraba el grupo Lassie, una de las marcas líderes del sector en el país. En este tiempo, ha conseguido tener una cuota de mercado del 21% y remodelar la estructura societaria del negocio. La arrocera tiene constituidas cinco empresas encargadas de la producción, comercialización y de la operativa industrial, las cuales cuelgan de la matriz Ebro Foods Netherland, B.V, que se dedica a la gestión de inversiones del grupo y cuyo capital pertenece a la compañía española Herba Foods, la unidad arrocera para Europa. La principal ventaja de esta estructura es beneficiarse de las ventajas fiscales que ofrecen los Países Bajos, los holdings no tributan por los dividendos y ganancias que reportan sus filiales. De esta manera, Ebro Foods Netherland reduce la carga fiscal liberando a las compañías industriales de pagar pesados impuestos por su actividad.
Además, la compañía se aprovecha de los acuerdos fiscales entre Holanda y España para evitar la doble imposición, con lo que las ganancias procedentes que llegan a nuestro país apenas tributan.
Puede leer el reportaje completo en la revista DIRIGENTES del mes de septiembre.