La recesión de la economía brasileña no ha dejado indiferente a ningún sector económico, tampoco a las automovilísticas. Con una inflación del 10,7% interanual y un desempleo cercano al 7%, los expertos esperaban que el sector levantara cabeza a principios de este año, aunque los datos parecen indicar que la ansiada recuperación se hará esperar. […]
Dirigentes Digital
| 15 feb 2016
La recesión de la economía brasileña no ha dejado indiferente a ningún sector económico, tampoco a las automovilísticas. Con una inflación del 10,7% interanual y un desempleo cercano al 7%, los expertos esperaban que el sector levantara cabeza a principios de este año, aunque los datos parecen indicar que la ansiada recuperación se hará esperar.
15.000 trabajadores fueron despedidos de su trabajo en el sector automovilístico en Brasil durante 2015, cerca del 10% del total de empleados de este sector en el país. Las automovilísticas redujeron su producción total en Brasil casi un 23%, con lo que se vuelve a niveles de 2006, y aún se suceden los despidos y recortes para seguir a flote. En general, la industria brasileña pasa por un mal momento, y en 2015 registró una contracción del 8,3%, su peor dato desde el año 2003, y un 19,5% por debajo del nivel récord alcanzado en junio de 2013.
La última compañía en dar un paso ha sido Ford, que ha decidido suspender durante cinco meses el contrato de 1.800 de sus empleados de la fábrica que tiene en Camacari para evitar una renuncia en masa tras la caída de la producción. Durante ese tiempo, los trabajadores recibirán parte del salario del fondo de protección y tendrán que asistir a cursos de reciclaje profesional impartidos por la empresa.
En 2014, las automovilísticas ya recortaron unos 10.000 puestos de trabajo en sus fábricas brasileñas.