La Sala condena también a tres años de cárcel por cinco delitos de homicidio por imprudencia grave y lesiones al responsable de la empresa de Madridec (empresa propietaria del recinto y dependiente del ayuntamiento de Madrid), Francisco del Amo y al director general de Diviertt, Santiago Rojo. Miguel Ángel Morcillo, de Diviertt, y a Carlos Manzanares, de Kontrol 35, les impone una pena de dos años, seis meses y un día de prisión.
Por su parte, absuelve, sin embargo, al jefe de Policía Emilio Monteagudo y a los doctores Simón y Carlos Viñals. Los jueces creen que el operativo policial organizado por el Ayuntamiento, "a pesar de la precariedad, no tuvo influencia en lo sucedido".
Los magistrados consideran también que los coordinadores de Seguriber Juan José Paris y Raúl Monterde son responsables en menor grado y les impone una pena de multa (doce meses a una cuota diaria de 10 euros). También consideran que el responsable de seguridad Rafael Pastor cometió infracciones constitutivas de falta, que en la actualidad están despenalizadas, por lo que es absuelto, si bien debe responder, junto con todos los anteriores, del abono de las indemnizaciones a las familias de las víctimas, que giran en torno a los 350.000 euros para cada familia y a los lesionados en proporción a las lesiones y secuelas que padecieron.
Las familias de las víctimas recibirán distintas indemnizaciones que rondan los 350.000 euros para cada una de ellas.