Desde septiembre de este año, las cinco mayores empresas por capitalización bursátil de Estados Unidos son tecnológicas. Esto dice mucho de la importancia del sector dentro del tejido empresarial y económico del país. Estas compañías son: Apple, Google, Microsoft, Facebook y Amazon. Para ser conscientes de su magnitud, sólo las grandes empresas de Estados Unidos […]
Dirigentes Digital
| 08 nov 2016
Desde septiembre de este año, las cinco mayores empresas por capitalización bursátil de Estados Unidos son tecnológicas. Esto dice mucho de la importancia del sector dentro del tejido empresarial y económico del país. Estas compañías son: Apple, Google, Microsoft, Facebook y Amazon. Para ser conscientes de su magnitud, sólo las grandes empresas de Estados Unidos tienen 2.100 de dólares en efectivo en filiales para eludir el pago de impuestos. La cifra equivale al tamaño del PIB de Italia y crece a ritmos del 8% anual. La tecnología es el segundo sector más rentable de Estados Unidos, después del financiero, capitaneado por Wall Street. Desde un punto de vista sectorial, las TIC suponen el 70% del PIB estadounidense, al igual que lo es el consumo privado, desde el punto de vista macroeconómico y componente del Producto Interior Bruto americano. Silicon Valley se ha convertido en una fuente principal de financiación de las campañas políticas en las últimas elecciones, un reflejo no sólo de la riqueza de la industria, si no también de sus esfuerzos crecientes que está haciendo para dar forma a la política en Washington sobre la inmigración, la privacidad y la llamada economía colaborativa. Como industria, tecnología jugó un papel importante en la campaña de 2012. Incluyendo las donaciones a grupos externos, el sector desembolsó alrededor de 20 millones de dólares para el presidente Barack Obama y aproximadamente 9,2 millones por su rival republicano, Mitt Romney, dijo Crowdpac. ¿Qué propone Hillary Clinton? La candidata demócrata a la Casa Blanca, Hillary Clinton gana por goleada los apoyos de los dirigentes tecnológicos estadounidenses. Aunque su opositor demócrata, Bernie Sanders ha sido el que más financiación ha recibido por parte del sector (3,2 millones de dólares), muchos de los representantes importantes del mundo de la innovación se han volcado con Clinton. La primera parte del programa de la candidata demócrata se centra en la inversión en ciencias informáticas y en expandir el modelo STEM (Ciencia, Tecnología, Ingeniería y Matemáticas) para impulsar el capital humano. También plantea desplegar banda ancha de calidad para estudiantes y sentar las bases para la próxima generación de Internet móvil y el Internet de las cosas. Con especial hincapié en conectar lugares públicos. Clinton pretende asegurar que Estados Unidos conserva su posición como país líder en el mundo de la tecnología a través de las exportaciones y el libre flujo de dato. La candidata pretende además reforzar el apoyo a la innovación a través de a creación de normas de competencia, protección de la propiedad intelectual y salvaguardar la privacidad. También se plantea reforzar la formación en el sector. ¿Y Donald Trump? El candidato republicano, Donald Trump, se centra más en asuntos relacionados con la seguridad nacional y se ha mostrado en contra de la neutralidad de la Red porque, según ha afirmado a medios estadounidenses, perjudica las opiniones conservadoras. Clinton sí apuesta por el uso del Big Data dentro de las Administraciones Públicas. En cuestión de ciberseguridad, ambos candidatos demandan una mayor vigilancia y un mayor endurecimiento de la interceptación de comunicaciones. Trump ha llegado a señalar que se deberían cerrar algunos sitios web, lo que ha hundido aún más su reputación entre los gigantes del sector. Reed Hastings, CEO de Netflix, aseguró directamente que “Trump destruiría mucho de lo que América tiene de bueno”.