El proyecto de Presupuestos Generales del Estado para 2017 contempla por primera vez desde 2015 un descenso en las cotizaciones sociales del 5,7%, hasta alcanzar unos ingresos equivalentes a los 110.560 millones. Por otro lado, se espera que el gasto en prestaciones contributivas crezca un 3,2%, hasta los 122.777 millones. Las cuentas públicas se han […]
Dirigentes Digital
| 11 abr 2017
El proyecto de Presupuestos Generales del Estado para 2017 contempla por primera vez desde 2015 un descenso en las cotizaciones sociales del 5,7%, hasta alcanzar unos ingresos equivalentes a los 110.560 millones. Por otro lado, se espera que el gasto en prestaciones contributivas crezca un 3,2%, hasta los 122.777 millones. Las cuentas públicas se han caracterizado por su falta de precisión en las previsiones durante los años de ajustes presupuestario. Tan sólo en los dos últimos ejercicios, el balance de la Seguridad Social ha registrado desviaciones entre las previsiones de ingresos y de gastos contributivos equivalentes a los 30.983 millones de euros, frente a un déficit presupuestado de 7.535 millones. Los errores de cálculo tanto en el peso de las cotizaciones (suponen en torno al 80% de los ingresos) como en el volumen de gasto en prestaciones contributivas (fundamentalmente pensiones de jubilación) han generado la brecha presupuestaria. Por ejemplo, en 2016 se contabilizaron unos ingresos vía empleo de 117.243 millones, frente a los 103.517 millones registrados en la ejecución presupuestaria. Del mismo modo, los gastos se dispararon de una previsión inicial de 118.942 millones hasta los 121.387 millones. La tendencia se mantiene si comparamos los presupuestos de 2015 con su ejecución. En esta ocasión, los ingresos por cotizaciones se desviaron un 8,5% de las previsiones iniciales, mientras que los gastos en prestaciones fueron un 4,7% superiores a lo esperado. La consecuencia lógica del descenso de la recaudación vía cotizaciones es la aplicación de otros mecanismos para garantizar la viabilidad del sistema. En 2016, se presupuestaron unas transferencias corrientes desde el Estado equivalentes a los 13.199 millones, que al final acabaron convirtiéndose en 16.066 millones. En la misma línea, la evolución de la ‘hucha de las pensiones’ (Fondo de Reserva de la Seguridad Social) en los últimos dos años refleja la urgente necesidad de financiación, con unas retiradas de 26.614 millones. Para este ejercicio, se espera que el Ejecutivo transfiera hasta 13.074 millones al sistema.