La Administración Trump ha anunciado su intención de renegociar con los acreedores del Tesoro una rebaja en la tasa de repago de su deuda, aproximadamente 85 céntimos por dólar. Esta decisión se toma en un contexto en el que Estados Unidos es uno de los países más endeudados del mundo (17,5 billones de deuda), pero […]
Dirigentes Digital
| 03 may 2017
La Administración Trump ha anunciado su intención de renegociar con los acreedores del Tesoro una rebaja en la tasa de repago de su deuda, aproximadamente 85 céntimos por dólar. Esta decisión se toma en un contexto en el que Estados Unidos es uno de los países más endeudados del mundo (17,5 billones de deuda), pero también el más seguro, ya que las garantías sobre su deuda son totales. En el hipotético escenario de que se hiciera efectiva la petición del presidente, ¿quién saldría más perjudicado? En contra de la creencia popular, no serían los chinos los más afectados, sino los propios estadounidenses. Los ciudadanos y entidades nacionales concentran un 67,5% del total de deuda. Los gobiernos estatales y locales, los fondos de pensiones, las mutuas y la propia Reserva Federal son los principales acreedores de Estados Unidos. China tan sólo acumula en torno a un 7% del total, mientras que el resto de países extranjeros concentran en conjunto un 32,5%. El anuncio de Donald Trump ha sacudido los mercados, ya que la renegociación de la deuda es una práctica propia de compañías con problemas financieros. Sin embargo, es muy probable que los inversores acepten dicha rebaja en el caso de que se solicite, según recogen los analistas de la CNN. De los 11,8 billones de deuda en propiedad de estadounidenses, 4,9 pertenecen a fondos de garantía del Gobierno como el de Seguridad Social, 4,7 pertenecen a individuos, fondos de pensiones y gobiernos locales y los 2,3 restantes a la Reserva Federal. China es el segundo mayor inversor con una cartera de 1,15 billones en valores de Tesoro, seguida de cerca por Japón, con 1,03 billones.