La transformación del skyline de Nueva York

El gasto total para la construcción residencial y comercial en Nueva York este 2017 se espera que alcance los 18.000 millones de dólares, según cifras publicadas en el New York Building Congress. A esto hay que unir los 10.000 millones que gastará en edificios públicos el gobierno local. “Ese es el mayor valor de construcción que hemos tenido desde 2007. Estamos de vuelta en términos de nueva construcción”, explica Barry LePatner, abogado especializado en la industria de la construcción. Esto se debe, entre otras cosas, a la disponibilidad de dinero líquido, el impulso de los inversores extranjeros o la vuelta de los créditos. Esa dinámica actividad está impulsando los precios de la construcción. La Gran Manzana se sitúa como el mercado de construcción más caro del mundo según la Encuesta Internacional del Mercado de la Construcción de 2017 realizada por la empresa Turner&Townsend, donde se estudiaron 43 mercados mundiales. En 2016, el gasto en construcción en Nueva York alcanzó un récord histórico de 42.000 millones de dólares. Algo que no sorprende a Carlo Scissura, presidente del Congreso de la Construcción de Nueva York. “Esta ciudad es la número uno en todo. Están los mejores edificios y es un lugar caro, pero eso ya lo sabemos”. “La calidad y la recompensa de Nueva York no se corresponde con nada en el mundo”, añadía. El gasto total medio en Nueva York ha alcanzado los 354 dólares el pie cuadrado (apenas 30 centímetros cuadrados), una cifra asombrosa que ayuda a explicar, por ejemplo, por qué se necesitarán más de 3.000 millones de dólares para construir el rascacielos de 57 pisos de One Vanderbilt, junto a Grand Central Station, cuya finalización está programada para 2020. Puede leer el reportaje completo aquí