Una de las grandes preocupaciones de toda mujer es concluir la jornada de trabajo con un rostro impoluto. Esto en ocasiones resulta complicado porque a lo largo del día se viven situaciones de estrés, el rostro está expuesto a agentes externos como la contaminación y la humedad y muchas de las veces somos nosotras mismas quiénes […]
Dirigentes Digital
| 15 feb 2018
Una de las grandes preocupaciones de toda mujer es concluir la jornada de trabajo con un rostro impoluto. Esto en ocasiones resulta complicado porque a lo largo del día se viven situaciones de estrés, el rostro está expuesto a agentes externos como la contaminación y la humedad y muchas de las veces somos nosotras mismas quiénes tendemos a tocarnos la cara. Todo ello impide que el maquillaje se mantenga en su sitio y parezca que estás recién maquillada. Si vives este tipo de situación en tu día a día te recomendamos que sigas los consejos que te proponemos a continuación para lucir un maquillaje siempre perfecto. La limpieza es esencial, eliminar las impurezas del rostro ayudará a fijar el maquillaje durante más horas. Lo ideal el limpiar el rostro dos veces al día. Por supuesto antes de acostarse hay que borrar cualquier resto de maquillaje de la piel. Para ello lo mejor es utilizar un limpiador facial efecto jabón y lavar con abundante agua. El agua micelar seguida de un tónico para cerrar los poros, se convertirán en tus aliados si buscas un método eficaz a la par que rápido. Por la mañana lavarse con agua y jabón también es recomendable antes de proceder a maquillarse. Antes de aplicar la base de maquillaje, hay que hidratar la piel, lo primero que hay que hacer es utilizar un sérum para hidratar las células de la piel en profundidad, lo idóneo es dejarlo actuar durante unos minutos antes de aplicarse la crema hidratante. Para lograr una mayor fijación del maquillaje, este es el momento de aplicarse un primer o una prebase. Tras estos pasos de limpieza e hidratación, llegamos a la aplicación del maquillaje. Es muy importante elegir el producto que más se adapte a cada tipo de piel. Si tienes tendencia a tener una piel grasa, en el mercado hay una gran variedad de bases de maquillaje ‘oil free’, también puedes apostar por maquillaje en polvo o compacto. Por el contrario, con una piel seca, es recomendable utilizar un maquillaje que aporte jugosidad a la piel. Los polvos sueltos o translúcidos aplicados con pequeños toquecitos con la brocha, son claves para fijar el maquillaje. Lo ideas es aplicarlos con cuidado, sin mover el maquillaje que hemos puesto anteriormente. Pasados unos segundos eliminar el exceso de producto, es fundamental para lograr el efecto deseado. El toque final, se consigue gracias a un ‘spray’ fijador, desempeña la misma función que la laca de pelo. Es necesario tener en cuenta que hay productos con una mayor resistencia que otros, en el caso de la máscara de pestañas apostar por una ‘waterproof’, ayudará a mantener el maquillaje de los ojos intacto durante horas. Con los labiales ocurre exactamente lo mismo, cada vez hay más productos que se mantienen perfectos incluso después de comer. Para que los labios no se cuarteen o sufran, recomendamos aplicar una prebase que hidrate y fije el labial. Lo que no hay que olvidar nunca es eliminar todo el maquillaje, para dejar respirar la piel del rostro durante las horas de sueño, es aconsejable aplicarse tratamientos que regeneren e hidraten la piel en el tiempo de descanso. Se logra amanecer con un rostro más brillante y despierto, perfecto para comenzar de nuevo con la rutina de belleza diaria.