Puertos deportivos: una nueva ola de demanda

El turismo mantiene unas cifras de crecimiento que parecen no tener techo. No solo se deja ver en la ingente cantidad de turistas que entran en España, sino que un gran número de negocios adyacentes se benefician, como ocurre con el turismo náutico. Prueba de ello es el aumento en los precios de cesión y alquiler, así como en el grado de ocupación. Los datos de 2017 muestran que 23 de las principales empresas gestoras de los amarres obtuvieron unos ingresos de 74 millones de euros, según una estimación de DBK de Informa, lo que representa una mejora de alrededor del 3,3%, similar a la que consiguieron en 2016 (3,2%). Estas cifras revelan la buena marcha del sector, dado que las empresas privadas gestionan el 80% de los amarres en los puertos deportivos y turísticos, mientras que el resto los controlan las autoridades portuarias o las autonomías. De los 375 puertos deportivos, la mayoría se encuentran en el Mediterráneo (60%), con más de 30 mil amarres en Cataluña, 22 mil en Baleares y 20 mil en Andalucía. De esta forma, Cataluña acumula el 22,7% de los amarres, mientras que Baleares controla el 16,7% y Andalucía el 15,2%. Por otra parte, la matriculación de embarcaciones ha registrado un aumento de doble dígito en enero con respecto al mismo mes de 2017. En total se matricularon 198 embarcaciones, con un aumento del 14,5%, según indica la Asociación Nacional de Empresas Náuticas (ANEN). Desde ANEN consideran que se trata de “un buen dato para un mes fuera de temporada”. De las 198 embarcaciones, 32 se destinarán al alquiler (chárter náutico). El segmento que experimenta una mayor subida es el de esloras de hasta 8 metros (+21,4%), que representa el 89% del mercado náutico nacional, con un total de 176 matriculaciones. El resto de esloras sufren caídas, así como el de los barcos de más de 16 metros, un sector donde tan solo se matriculó una unidad.