Tras una semana muy positiva para los activos de riesgo, que recuperaron a partir del martes gran parte de lo perdido tras confirmarse el Brexit, las Bolsas europeas comienzan una nueva semana en la que este factor y su impacto en la política y en la economía de la región seguirán siendo analizados y, por […]
Dirigentes Digital
| 04 jul 2016
Tras una semana muy positiva para los activos de riesgo, que recuperaron a partir del martes gran parte de lo perdido tras confirmarse el Brexit, las Bolsas europeas comienzan una nueva semana en la que este factor y su impacto en la política y en la economía de la región seguirán siendo analizados y, por tanto, continuará muy presente en la mente de los inversores a la hora de diseñar sus estrategias de inversión de cara a la segunda mitad del ejercicio.
En este sentido, señalar que entendemos que el impacto real de esta decisión adoptada por el Reino Unido dependerá de cuándo y cómo se lleve a cabo y ello, a su vez, va a estar muy condicionado por la elección del nuevo líder del partido conservador británico que, con toda seguridad, será el primer ministro que deberá "organizar" la salida del país de la Unión. Si finalmente se impone un candidato del Brexit, es posible que el proceso se acelere y que ello, dado la inexistencia de un Plan B, provoque una ruptura brusca y el incremento de la incertidumbre, lo que volverá a penalizar a los activos de riesgo a nivel mundial. Por el contrario, si el candidato que se hace con el control del partido conservador es del bando del Remain, no tenemos duda de que respetará la decisión de la mayoría de los británicos, aunque alargará el proceso lo máximo posible e intentará "descafeinarlo" para reducir el "daño". Este planteamiento creemos que será bien acogido por los inversores, ya que todo apunta que parece que es por el que están apostando.
Pero además del Brexit, los inversores se enfrentan en lo que resta del ejercicio a varias importantes incertidumbres:
i) las elecciones estadounidenses que, entendemos, hasta ahora no han impactado realmente en los mercados pero que creemos que a partir de la celebración de las convenciones de los partidos demócrata y republicano y la elección definitiva de candidatos, lo comenzarán a hacer. Siendo los previsibles candidatos de ambos partidos los que más rechazo han generado en la historia de EEUU, entendemos que este factor va a terminar pesando en el comportamiento de las bolsas ya que puede terminar lastrando el ya de por sí débil crecimiento económico estadounidense;
ii) la evolución de la economía de China, que sigue generando grandes dudas a nivel mundial, y la posibilidad de que las autoridades del país vuelvan a la carga con la devaluación de la divisa. En los últimos días el yuan ha perdido valor aunque el hecho ha pasado desapercibido para los inversores, que han estado más pendientes del Brexit. El pasado agosto un movimiento de las autoridades monetarias chinas en este sentido provocó una fuerte corrección en las bolsas, por lo que habrá que estar muy atentos a un nuevo intento en este sentido;
iii) la capitalización y/o rescate de la banca italiana, algo de lo que se viene hablando en los últimos meses pero que no termina de cerrarse. Recientemente se ha hablado de un plan del Gobierno italiano para aportar 40.000 millones al sector, aunque, de momento, no se ha alcanzado un acuerdo con la UE en la forma de hacerlo. Este tema sigue lastrando el comportamiento del sector bancario italiano y, por simpatía, del resto del sector europeo que, a su vez, está pasando por un momento complicado dado que la nueva regulación y los bajos tipos de interés están lastrando su rentabilidad;
iv) la celebración en octubre de un nuevo referéndum en Europa, esta vez en Italia, para la aprobación de los cambios constitucionales diseñados por el Gobierno Renzi. Precisamente el primer ministro del país ha condicionado su continuidad a la aprobación de los mismos. De no "salirle la jugada" y verse forzado Renzi a dimitir, el país entraría en una fase de desconcierto político y estaría, probablemente, abocado, a la celebración de nuevas elecciones en las que los partidos populistas de derechas e izquierdas (Liga Norte y Movimiento 5 Estrellas) pueden subir mucho.
Por tanto, y a pesar de que en los últimos días los inversores parece que se han olvidado de todos estos temas, apostando claramente por los activos de riesgo, creemos que la segunda mitad del ejercicio se presenta al menos tan compleja como la primera, por lo que aconsejamos ser prudentes a la hora de diseñar las carteras, dando un peso relativo importante a los valores de corte defensivo.
Más a corto, y en lo que hace referencia a la semana que hoy comienza, señalar que la falta de la referencia de Wall Street, mercado que permanecerá cerrado por la celebración en Estados Unidos del 4 de Julio, Día de la Independencia, hará que la jornada sea de transición. Posteriormente, y a medida que avance la misma, la atención de los inversores girará hacia la macro, dado que en los próximos días se darán a conocer importantes datos.
Así, mañana conoceremos en la Zona Euro los muy relevantes índices adelantados de actividad de los sectores de los servicios del mes de junio, índices que se publicarán en Estados Unidos el miércoles. Además, el viernes se publicará en este país los datos de empleo del mismo mes, que servirán para hacernos una idea real sobre el estado del mercado laboral estadounidense, mercado cuya mejoría en los últimos meses parece haberse ralentizado. Todas estas cifras servirán para conocer el estado de las principales economía occidentales antes del Brexit, algo muy importante para saber en qué estado afrontan el periodo de incertidumbre que sin ninguna duda este factor va a generar.