Desde luego que la renta fija se encuentra en el ojo del huracán. Los expertos siguen analizando las reacciones en todas las clases de activos y qué es lo que está sucediendo para que la rentabilidad de los bonos gubernamentales se haya disparado de forma generalizada. Así, entre otros factores, las expectativas de un aumento […]
Dirigentes Digital
| 22 feb 2018
Desde luego que la renta fija se encuentra en el ojo del huracán. Los expertos siguen analizando las reacciones en todas las clases de activos y qué es lo que está sucediendo para que la rentabilidad de los bonos gubernamentales se haya disparado de forma generalizada. Así, entre otros factores, las expectativas de un aumento de la inflación y la mejora del mercado laboral en Estados Unidos, están cambiando el esquema en el entorno de la inversión. Según apuntaban los expertos de Legg Mason en un reciente informe, esta información, junto con el hecho de que las caídas fueron generalizadas en buena parte de las categorías del comercio minorista, “llevó a algunos analistas a reducir sus perspectivas de crecimiento para el primer trimestre, ya que el consumo representa casi dos tercios del PIB de Estados Unidos”. Algunos inversores, como John Bellows, de Western Asset (parte de Legg Mason), creen que “las estimaciones de inflación del mercado podrían ser demasiado optimistas”. El yen aumentó sus ganancias frente a un dólar en alza, un 2,8% más. Muchos analistas dicen que el avance del 5,3% en el yen frente a la moneda estadounidense se debe a “una valoración atractiva, la especulación sobre el estímulo monetario del país se reducirá pronto, y también a medida que la moneda gane estatus de refugio seguro”. Esto podría hacerse más prominente ya que “el dólar podría verse arrastrado por el aumento del déficit presupuestario y de la cuenta corriente”. Algo que impacta directamente en la renta fija. Desde el punto de vista de los expertos de Julius Baer desde hace algunas semanas, es mejor tener en cartera “productos protegidos con capital en el segmento de high yield en Estados Unidos y en un nivel “mucho más alto de precios de bonos de lo que habíamos previsto, el mercado está empezando a corregir”. En este sentido, después de los diferenciales de crédito, la ventaja de rendimiento de los bonos con más riesgo sobre los rendimientos de los bonos del gobierno para compensar el riesgo de crédito, “se redujo y sería inevitable la ampliación”. Así pues, los precios de los fondos mutuos y los fondos negociados en bolsa que invierten en bonos de grado especulativo estadounidenses finalmente “están disminuyendo”, lo que podría hacer vencer una serie de “operaciones apalancadas”. De hecho, hay mucha evidencia de alto apalancamiento en el mercado crediticio, lo que “podría agravar la corrección que se está desmoronando ahora“. También podríamos estar empezando a ver “una corrección en los bonos de los mercados emergentes, con una expansión crediticia sustancial”. Contrariamente a la opinión generalizada, los expertos de Julius Baer sobre los bonos de high yield estadounidenses siguen siendo “optimistas con respecto a los fundamentales de los mercados emergentes” y consideran que la corrección en curso de las valoraciones “es un ajuste a niveles más razonables”.