La primera mitad del año, marcada por la crisis del coronavirus, ha aportado un balance positivo a Endesa, que mejora sus resultados en estos seis meses con respecto al mismo periodo del año anterior. En concreto, Endesa tuvo unas ganancias de 1.128 millones de euros, un 45,4% más. La eléctrica destaca estos “buenos resultados” conseguidos […]
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| 28 jul 2020
La primera mitad del año, marcada por la crisis del coronavirus, ha aportado un balance positivo a Endesa, que mejora sus resultados en estos seis meses con respecto al mismo periodo del año anterior. En concreto, Endesa tuvo unas ganancias de 1.128 millones de euros, un 45,4% más.
La eléctrica destaca estos “buenos resultados” conseguidos “a pesar de la grave situación en la que se ha visto envuelto todo el país con motivo de la pandemia”. De hecho, Endesa se beneficia de la entrada en vigor del nuevo Convenio Colectivo y de una restructuración de plantilla que tiene un impacto positivo de 267 millones de euros.
De todos modos, aunque se excluya ese importe, el beneficio de Endesa seguiría siendo un 11% superior al del año pasado. Para la compañía, esas cifras demuestran “la fortaleza de las cuentas de la compañía a pesar del escenario actual”.
A pesar de estos registros, Endesa recalca que el parón de la actividad económica “ha dejado una importante huella en la demanda de electricidad y en los precios”. En la península, la demanda se ha reducido un 7,8%, mientras que en los dos archipiélagos la caída es del 13,2%. Asimismo, también se han reducido los precios, un 44% en comparación con la primera mitad de 2019.
De ese modo, Endesa afirma que las caídas de precios y demanda han restado 75 millones de euros a su beneficio neto. El consejero delegado de la compañía, José Bogas, afirma que “Endesa ha demostrado una gran fortaleza en un contexto del que no teníamos referencias previas”.
Otra cifra relevante que deja este primer semestre es la caída de ingresos, que van desde los 9.791 millones de 2019 hasta los 8.883 millones en 2020, lo que representa un descenso del 9,3%. En cuanto a la deuda, se incrementó un 11,2%, hasta los 7.092 millones de euros, mientras que las inversiones brutas cayeron desde los 956 millones hasta los 797 millones (-16,6%).