La coyuntura económica lleva meses mostrando signos de fortaleza pese a la inflación y la consecuente subida de los tipos de interés. Esta misma semana, el Gobierno ha mejorado las proyecciones de crecimiento tres décimas hasta el 2,4%, aunque ha rebajado las perspectivas para 2024 en cuatro décimas. En este contexto, la Cámara de Comercio […]
NacionalDirigentes Digital
| 18 oct 2023
La coyuntura económica lleva meses mostrando signos de fortaleza pese a la inflación y la consecuente subida de los tipos de interés. Esta misma semana, el Gobierno ha mejorado las proyecciones de crecimiento tres décimas hasta el 2,4%, aunque ha rebajado las perspectivas para 2024 en cuatro décimas. En este contexto, la Cámara de Comercio de España ha realizado el Estudio sobre Clima Empresarial en España de 2023, en el que ha realizado 2.150 encuestas a empresas con más de cinco empleados entre el 28 de agosto y el 21 de septiembre. La institución ha preguntado sobre el clima económico actual y las previsiones presentes y futuras de las organizaciones empresariales.
Al ser preguntados por la situación de su empresa en lo que va de año, teniendo en cuenta las expectativas fijadas para el mismo, casi la mitad (44,6%) afirma que están cumpliendo con lo previsto para 2023. Asimismo, casi tres de cada diez (29,7%) afirman que sus organizaciones empresariales están presentando un rendimiento superior al previsto, mientras que una cuarta parte de los encuestados (25,7%) responde que los resultados se sitúan por debajo de las expectativas.
Cabe destacar que los resultados son similares independientemente del tamaño de las empresas y que, si se analizan por sectores, los negocios que operan en el de la construcción y en turismo y hostelería son los que mejores resultados están teniendo en comparación con las expectativas iniciales. En el lado contrario, los dirigentes de comercios y de negocios en el sector agroalimentario son los que más afirman no haber cumplido con las expectativas planteadas a inicios del año.
Al pedir que se identifiquen aquellos factores que dificultan el crecimiento empresarial, un 45% de las empresas señalan el incremento de los costes de los insumos o suministros. De hecho, es la principal razón en todos los sectores menos en la construcción, donde el 48,3% de los participantes culpa a la escasez de mano de obra. En segundo lugar, un 34,5% menciona el aumento de los costes laborales, mientras que un 29,9% señala la elevada presión fiscal.
La Cámara de Comercio de España también ha preguntado por las principales preocupaciones de los empresarios, que coinciden con los factores que limitan el crecimiento de sus empresas. De esta manera, los dirigentes señalan en primer lugar a la inflación (35,2%), seguido de la presión fiscal (34,7%), la caída de la demanda (33,4%) y la escasez de perfiles profesionales (28,7%). Pese a que el IPC marcó un 1,9% en junio (mínimo desde que comenzara la espiral inflacionista), los precios llevan creciendo desde entonces y ya acumulan tres meses consecutivos al alza: septiembre cerró con un 3,5% interanual. En cambio, de cara al futuro aparecen nuevas amenazas para los encuestados, como la subida de tipos de interés (37%) y la situación sociopolítica (35,9%)
En cuanto a las perspectivas de las organizaciones empresariales para 2024, la mitad de las organizaciones empresariales encuestadas (48,9%) son optimistas, cifra casi calcada a los que ven el año que viene con pesimismo (48,5%). En este caso, las empresas grandes sí que se muestran más optimistas (68,9%) frente a tan solo el 43,6% de aquellas con entre seis y nueve empleados.
Si se concreta más en diferentes aspectos, el comercio exterior es lo que suscita mejores perspectivas de cara a 2024: el 53,8% de las empresas encuestadas prevén aumentar las ventas en el extranjero el año que viene. En el lado contrario, las inversiones y la contratación de personal son los dos factores en los que las organizaciones empresariales se muestran más pesimistas.
En referencia al conjunto de la economía, las empresas participantes se muestran más pesimistas. Específicamente, alrededor de un 60% de los encuestados prevén que los precios al consumo, las condiciones y el acceso a la financiación y los costes laborales empeoren. En cambio, solo un 44% considera que la actividad económica y el empleo empeoren en 2024. Pese a ser los factores en los que los dirigentes se muestran más optimistas, en todos ellos el saldo es negativo.