Compras, lanzamientos, desapariciones, marcas extranjeras… en los últimos tiempos estamos viendo una importante transformación en el sector de la restauración en España. Somos un país donde tradicionalmente la hostelería ha sido un sector relevante. Nos gusta salir, para nosotros celebrar es sinónimo de comer, de beber, de reunirnos alrededor de una mesa, pero los cambios […]
Dirigentes Digital
| 24 sep 2018
Compras, lanzamientos, desapariciones, marcas extranjeras… en los últimos tiempos estamos viendo una importante transformación en el sector de la restauración en España. Somos un país donde tradicionalmente la hostelería ha sido un sector relevante. Nos gusta salir, para nosotros celebrar es sinónimo de comer, de beber, de reunirnos alrededor de una mesa, pero los cambios en los hábitos de consumo de un cliente cada vez más exigente e informado, la globalización de la gastronomía y la irrupción del concepto de marca en el ámbito de los restaurantes han hecho que el panorama cambie radicalmente. Cada vez nos sentimos más cómodos en el entorno de una marca o franquicia de restauración, en gran medida, porque reduce nuestro nivel de incertidumbre; sabemos qué vamos a encontrar y a qué precio y que será de forma estandarizada en cualquier lugar. Esta nueva forma de vivir el consumo fuera del hogar ha abierto las puertas de un mercado con enorme potencial en nuestro país; siempre habrá hueco en España para la hostelería independiente, pero la tendencia del mercado apunta de forma inequívoca a un incremento importante de la presencia de las cadenas de restauración, que son las que, ya actualmente, lideran el crecimiento del mercado. En este nuevo escenario, la competencia entre marcas se intensificará notablemente y el área de marketing se convertirá en crítica para todas aquellas compañías que quieran ser relevantes para el consumidor. Las marcas que no vean la ola de marketing que se avecina, que ya está aquí, verán comprometida su supervivencia.