Si se compara el beneficio del primer trimestre de Acerinox con lo conseguido tres meses antes, en el cuarto trimestre de 2018, la mejora ha sido del 103 por cien. Y lo mismo ocurre con el dato del Ebitda. Los 90 millones de esta partida conseguidos de enero a marzo suponen un descenso del 23,5 por ciento frente a igual periodo de hace un año, pero un alza del 56 por ciento frente a los últimos tres meses del ejercicio anterior.

En este sentido, desde Acerinox esperan que se mantenga esta tendencia positiva en las cuentas del segundo trimestre.

El fabricante de acero ha visto caer su facturación un 4,1 por ciento hasta los 1.202 millones de euros en el primer trimestre del ejercicio, aunque éstas avanza un 5,5 por ciento si la comparamos con el trimestre anterior.

La deuda financiera neta ha cerrado marzo en los 573 millones de euros. Se ha incrementado desde los 552 millones de finales de 2018, después de invertir 49 millones de euros en autocartera.

Con el plan que Acerinox va a ejecutar entre este año y 2023, la previsión de la compañía pasa por obtener retornos anuales de 125 millones de euros recurrentes en términos de Ebitda al final de ese periodo.