Según los datos de las cuentas financieras de la economía española, difundidos por el Banco de España, los activos financieros de las familias españolas se situaron en 2,67 billones de euros al cierre del primer semestre del año. Los hogares, por lo tanto, redujeron en el 1% su saldo en activos financieros respecto a la segunda mitad del 2021. 

Esta caída en el volumen de los activos financieros se debió a las correcciones provocadas en los mercados financieros, tanto de bonos como de acciones, como consecuencia de las actuaciones de los Bancos Centrales sobre los tipos de interés oficiales, en un entorno de tasas de inflación elevadas y temores de recesión en las economías mundiales.

La adquisición neta de activos financieros por parte de los hogares durante la primera mitad de 2022 ascendió hasta los 42.659 millones de euros. En este sentido, los fondos de Inversión destacaron como activo financiero de referencia para el ahorrador español, ya que registraron 4.263 millones de euros de suscripciones netas positivas, solo superado por las cuentas bancarias. 

El incremento experimentado por el PIB doméstico hasta junio provocó que la ratio activos/PIB disminuyera ligeramente respecto al año 2021. No obstante, se mantuvo en torno al 210% del PIB. 

El total de pasivos financieros de las familias repuntaron ligeramente hasta el 1,6% en términos interanuales, manteniéndose en torno a los 0,8 billones de euros. La riqueza financiera neta de los hogares experimentó en junio un descenso del 1%, situándose en 1,89 billones de euros, manteniéndose cerca de sus máximos históricos.