En esta crisis financiera, donde la pandemia Covid-19 ha sido el elemento clave para entender de ganadores y perdedores que se han registrado en los principales índices bursátiles, los activos refugio como las materias primas han ganado peso. Así, su revalorización es un hecho, tanto que JP Morgan señalaba en su último informe que nos […]
BolsasEn esta crisis financiera, donde la pandemia Covid-19 ha sido el elemento clave para entender de ganadores y perdedores que se han registrado en los principales índices bursátiles, los activos refugio como las materias primas han ganado peso.
Así, su revalorización es un hecho, tanto que JP Morgan señalaba en su último informe que nos encontramos ante un nuevo “superciclo” alcista.
Y es que en un momento donde muchos de las commodities, entre los que también destaca la plata y el oro, están registrando nuevos máximos, el banco de inversiones está más que optimista ante ellos.
De hecho, según expresa JP Morgan, las razones que justifican este gran rally responden a la recuperación económica (y por tanto, el aumento de la demanda), la búsqueda de la rentabilidad para evitar la temida inflación y también, que los nuevos vehículos que se fabrican necesitan una mayor cantidad de metales preciosos como el platino, la plata y el paladio, algo que también influye.
“Creemos que ha comenzado el nuevo repunte de las materias primas y, en particular, el ciclo alcista del petróleo”, indican desde el informe de JP Morgan.
Y es que según sus datos, las materias primas habrían registrado cuatro ‘superciclos’ en los últimos 100 años, el último de ellos se dio en el 2008.
Los commodities que despuntan
Por su parte, el último informe de materias primas de WisdomTree señala varios puntos determinantes de cómo nos enfrentamos al mercado de las commodities en este año del buey.
Por un lado, la gestora indica que los metales preciosos se encuentran bifurcados en función del rendimiento. “El oro y el paladio quedaron en segundo plano el mes pasado, mientras que la plata y el platino obtuvieron fuertes ganancias”, comentan.
En lo que respecta al sector energético, este mes de enero ha superado a todos los demás sectores en cuanto a materias primas se refiere tras registrar una ganancia cercana al 10%. “Los mercados siguen siendo optimistas sobre la retirada de inventarios, ya que el cumplimiento de la OPEP + sigue siendo sólido. Mientras tanto, el clima frío en los EE. UU. Ha sido favorable para el gas natural”.
De hecho, el petróleo ha subido un 20% en un mes y ha superado los 60 dólares (49,6 euros) por barril de Brent, un nivel que no anotaba desde antes del inicio de la pandemia.
Por su parte, los metales industriales se mantienen sobre una base sólida. “Una combinación de sólidos fundamentos y un sentimiento de riesgo positivo en los mercados de renta variable continúa brindando apoyo al sector”, aclaran desde WisdomTree.
En los últimos seis meses sin embargo, han sido las materias primas agrícolas el sector de mejor desempeño. Este mes de enero también ha hecho que continúe esta tendencia alcista. Los precios por ejemplo de la soja y el maíz se han disparado.
El caso del oro y su revalorización
En el año 2020 que acabamos de dejar atrás el oro por ejemplo, ha experimentado una revalorización del 25% debido a la flexibilización monetaria y fiscal a la que hemos asistido en todo el mundo.
“Aunque no prevemos que un rendimiento tan impresionante se repita en 2021, somos positivos con respecto a las perspectivas del oro”, considera Giles Seurat, Gestor de multiactivos de La Francaise AM.
Y añade: “Esta divisa está sobrevalorada si observamos su tipo de cambio efectivo real a largo plazo. Además, la nueva Administración de EE.UU. será probablemente menos agresiva en materia de aranceles. Por lo tanto, las probabilidades de revalorización del dólar son reducidas”.
Otro aspecto que la gestora resalta del oro es que muchos inversores temen el aumento de la inflación que acompañaría a la recuperación financiera a medida que se vayan cumpliendo los calendarios de vacunación y en consecuencia, se relajen las medidas de de distanciamiento. “Históricamente, los inversores tienden a comprar oro para protegerse de la inflación, por lo que podríamos esperar flujos adicionales en el metal precioso este año”, aclaran.
Además, el hecho de que todo apunte a que la política monetaria en EEUU seguirá por la senda acomodaticia y que no reaccionará ante el repunte de la inflación de forma temporal, “la base monetaria debería seguir aumentando rápidamente, contribuyendo a que el oro tenga un buen comportamiento en términos de dólares”, precisan desde la Française.