Las bolsas europeas afrontan el viernes con un tono positivo después de una semana marcada por la incertidumbre y el miedo. Este último ha quedado patente en Estados Unidos, donde se han producido desplomes acusados a principios y mediados de la semana a pesar de que ayer Wall Street cerró con resultados mixtos en sus principales índices. El Dow Jones, su principal indicador descendió un 0,33% como consecuencia de la preocupación ligada a una inflación más alta de lo esperada. 

Asimismo, los inversores también se muestran cautelosos debido a la pérdida de valor de muchas criptomonedas ante el alza de los tipos de interés, donde sobresale el caso del bitcoin. Por su parte, en el mercado de materias primas el petróleo sigue destacando por su volatilidad, donde su subida podría encontrar respuesta en el veto por parte de la Unión Europea al petróleo ruso.

El Ibex 35 se sitúa por encima de los 8.200 puntos tras haber perdido la jornada de ayer un 1,35% y haber cedido un 1,46% en las cuatro jornadas anteriores. Al comienzo de la sesión cuatro valores cotizan en rojo con Naturgy a la cabeza (-3%), seguido de ACS (-1,1%) y Red Eléctrica (-0,95%), mientras que en el lado opuesto de la balanza se encuentran Siemens Gamesa (+2,45%), BBVA (+1,57%), Fluidra (+1,56%), Sabadell (+1,55%), Santander (+1,3%) y Amadeus (+1,27%).

El selectivo madrileño ha comenzado la jornada pendiente de la evolución de la guerra en Ucrania y los contagios en China. En España, el IPC bajó un 0,2% en abril en relación al mes anterior.