La crisis causada por el COVID-19 está generando una situación convulsa en los mercados. Por un lado, las perspectivas macro no están siendo buenas y, en algunos casos, se han corregido para anunciar peores escenarios. Sin embargo, al mismo tiempo, el avance de la desescalada en Europa y en Estados Unidos, unido con el anuncio de Moderna Inc sobre su vacuna contra el coronavirus, han llenado de esperanza a los mercados, al menos en el corto plazo.

Malos datos macro

Jerome Powell, presidente de la Reserva Federal, concedió el pasado lunes una entrevista en la CBS para hablar sobre la situación económica del país. Entre sus palabras destacan las perspectivas sobre una recuperación lenta que no llegaría hasta finales de 2021."Puede llevar un tiempo", indicó al no descartar que el declive económico podría "extenderse hasta finales del próximo año, realmente no lo sabemos".

Pese a esas preocupantes palabras, Powell también ha avanzado que la actividad económica de los Estados Unidos comenzará a recuperarse en la segunda mitad del año, siempre que “no haya una segunda oleada de infecciones”. Al mismo tiempo adivirtió que: "las personas deberán recuperar la confianza y quizás habrá que esperar a la llegada de una vacuna", dijo. Quizá por ello, varios expertos ya están valorando tipos negativos en la Fed para finales de este año.

En España, el Banco de España también ha pintado un escenario más negro para la economía nacional. El gobernador del BdE, Pablo Hernández de Cos, ha asegurado que la crisis será más larga de los esperado y que la deuda nacional podría superar el 120% del PIB. Por si fuera poco, la institución espera ahora un recorte del Producto Interior Bruto superior al 9% en el mejor de los escenarios. Por eso, ha pedido en el Congreso de los Diputados más responsabilidad a los políticos.

Por otro lado, el analista Toby Wu llama la atención sobre el recrudecimiento del conflicto entre EE UU y China: "EE UU ha anunciado que las compañías de semiconductores tendrán prohibido hacer suministros a Huawei y las compañías que tienen patentes de EE UU deben un obtener permiso previo del Gobierno antes de hacer ningún suministro a la multinacional china de tecnología". "Sin embargo, es importante destacar que está situación impulsará el desarrollado de semiconductores chinos, algo que era una necesidad perentoria".

Optimismo

Los motivos para el optimismo son prácticamente dos: el avance en la desescalada y el anuncio de Moderna Inc sobre la vacuna. Moderna Inc ha dado esperanzas al mercado tras anunciar que están probando una vacuna experimental contra el coronavirus. Lo más destacado es que en las primeras pruebas de la vacuna se ha comprobado que ha producido anticuerpos que pueden neutralizar el virus. Estos resultados se han obtenido en un pequeño ensayo clínico en etapas tempranas, aumentando su participación en un 25%. Moderna es una firma de biotecnología estadounidense que en su página web se define como una empresa que busca "cumplir la promesa de la ciencia del ARNm para crear una nueva generación de medicamentos transformadores para los pacientes".