El Dow Jones y el S&P 500 viven tiempos gloriosos rompiendo máximos históricos. Hace unas pocas semanas, primero Apple y luego Amazon superaron el billón de dólares en capitalización bursátil. Sin embargo, las tres grandes redes sociales cotizadas en los Estados Unidos no están contagiándose del optimismo del resto de las tecnológicas.

Facebook tocó máximos en julio de 2018 al cotizar en 217 dólares la acción. Sin embargo, desde entonces ha entrado en un periodo bajista que le ha llevado a estar cotizando entre los 150 y los 170 dólares la acción. Una fuerte caída que no ha sabido remontar. A finales de julio, Facebook cayó en solo unas horas un 20% y se dejó 119.000 millones de dólares de capitalización.

Un hecho que fue causado tras presentar unos resultados decepcionantes en cuanto a la ganancia de nuevos usuarios. A esto se añadió el conocimiento de otro dato negativo respecto a los márgenes de ganancias, que se desplomaron. Los costes de mejorar la privacidad y la ralentización de los ingresos por publicidad también afectaron, tanto que fue visto como un ‘profit warning’, un aviso de peores resultados de lo previsto a futuro. Desde entonces, la compañía liderada por Zuckerberg no ha levantado cabeza.

A Twitter le ha ocurrido algo similar a Facebook, desde julio la red social no levanta cabeza en sus cotizaciones de bolsa. Tras marcar el máximo al cotizar en 46,5 dólares por acción. Ahora se mueve entre los 25 y los 35 dólares. La senda bajista después de que, a finales de julio, tras presentar los resultados trimestrales, Twitter anunciase una pérdida de usuarios, algo que se unió a las críticas de Donald Trump a la red social. En solo unas horas perdió un 20,54% de su valor y no ha conseguido cambiar la tendencia.

A comienzos de septiembre, Twitter volvió a recibir otro palo bursátil que se produjo después de que el consejero delegado de la red social, Jack Dorsey, compareciera ante el Congreso de los Estados Unidos para responder a las preguntas sobre las políticas de la compañía en seguridad y control.

Snapchat es la red social con menos trayectoria en bolsa, a penas lleva un año cotizando y desde entonces ha perdido casi la mitad de su valor. En su salida a bolsa, cotizada cada acción en 17 dólares, ahora se mueve por debajo de los 10 dólares. Los continuos malos resultados y su batalla perdida contra Instagram Stories son los grandes culpables de que la red social más ‘teenager’ no consiga asentarse como una plataforma con buenas perspectivas de crecimiento.