La economía mundial ha cambiado mucho este último año. Desde que a finales del 2019 el Coronavirus se extendiera desde China al resto del mundo, la crisis sanitaria que ha azotado a los países del globo no ha podido dejar indiferente a los mercados financieros. Así podemos decir que esta pandemia por Covid-19 acumula ya […]
BolsasLa economía mundial ha cambiado mucho este último año. Desde que a finales del 2019 el Coronavirus se extendiera desde China al resto del mundo, la crisis sanitaria que ha azotado a los países del globo no ha podido dejar indiferente a los mercados financieros.
Así podemos decir que esta pandemia por Covid-19 acumula ya un número de víctimas impronunciable y una perspectiva financiera compleja y difícil. El déficit se ha disparado ante el parón de una economía mundial confinada y la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) ya calcula que el ratio de la deuda pública va a elevarse un 18%.
Los bancos centrales buscan desesperados la inflación pero los tipos de interés y la rentabilidad de los bonos se sitúan en mínimos, algo que por ejemplo hemos visto hace unos días en la decisión del Banco de Inglaterra de no llegar a bajar a negativo los tipos de interés pero sí mantenerlo en su mínimo de 0,1%.
De esta manera, la reapertura económica aún no clarificada en el calendario pero animada por el avance de una posible vacuna inminente y eficaz contra el virus, y el apoyo de los gobiernos y los bancos centrales, pretenden conseguir una recuperación disparada y en “V”. Pero ante este contexto, ¿qué nos espera el 2021?
El director asociado de investigación de WisdomTree, Mobeen Tahir, ha señalado que, a pesar del ruido que se puede estar generando en las bolsas estos días, hay que estar atento a las fuerzas que van a macar el próximo año.
Una recuperación económica lenta y con una vacuna bajo el brazo
La primera de ellas es la ansiada recuperación económica. Para el experto, independientemente de la forma que le queramos dar a la situación de valle en la que nos encontramos, “ya se está produciendo una recuperación económica constante a nivel mundial, como lo destacan los datos del PIB del tercer trimestre de EE. UU., Europa y China”. Eso sí, antes de cantar victoria Tahir, apunta que estas economías todavía están en plena fase de recuperación y “están lejos de lograr nuevos avances en comparación con los niveles anteriores a la pandemia”.
Aún así se augura que de materializarse las promesas de las vacunas, el crecimiento económico podría acelerarse y los sectores que peor lo han pasado con esta crisis (como el de la energía, los viajes, el ocio o las finanzas) podrán respirar algo más aliviados.
Una inflación asociada al crecimiento
“A medida que la actividad económica cobra impulso, es probable que aumente la inflación”, explica apuntando que ya se están viendo estas señales que probablemente continuarán en el año venidero.
Se espera que los bancos centrales, y en especial la Fed, sigan en su curso permitiendo que la inflación aumente más allá del objetivo del 2% y será entonces cuando, según el experto, los inversores tendrán que elegir crecer o preservar el valor real de sus activos.
“Es probable que los productos básicos generales y el oro estén en mejores condiciones para complementar las acciones en carteras diversificadas con el fin de lograr una cobertura de inflación”, aclara.
China, un actor importante sobre el tablero de juego
El gigante asiático ha anunciado recientemente su plan para 2021-2025 donde su política de doble circulación se ha marcado como objetivo un crecimiento tanto de su economía nacional como del comercio internacional.
Eso sí, parece que esta potencia está insistiendo mucho esta vez en un enfoque renovado de la ciencia, algo que tal y como explica el entendido de WisdomTree, “ es un buen augurio para las materias primas que alimentan estas tecnologías, es decir, metales industriales como el cobre, el níquel y la plata, por nombrar algunos”.
Por otro lado, la tan comentada situación de mejora de los lazos comerciales entre Estados Unidos y China con la administración de Joe Biden “pueden proporcionar vientos de cola para este sector de productos básicos”, explica.
¿Se revertirán los cambios que se han visto en los meses de pandemia?
Pese a que la gran mayoría de sectores se han visto afectados por el Covid-19 y sus medidas restrictivas, lo cierto es que esta pandemia ha traído bajo el brazo algunas tendencias (como puede ser una conexión mejorada a la red) que, según Thair, es poco probable que se reviertan.
“La mejora de la calidad del aire en muchas ciudades, a medida que se paraban automóviles, trenes y aviones, ha traído consigo la discusión sobre fuentes de energía más limpias, lo que ha despertado el interés de los inversores en algunas temáticas como las baterías que impulsan la revolución de los vehículos eléctricos”, ejemplifica.
“Se espera que muchos de estos cambios continúen progresando incluso en un mundo posterior a una pandemia”, aclara el experto.