Tras la vuelta del periodo vacacional, y un agosto marcado por las subidas bursátiles cabe preguntarse qué deparará el mes de septiembre a los mercados. Sobre todo, después de que la Reserva Federal se mostrara especialmente cauta en la reunión de Jackson Hole y dejara entrever que la retirada de estímulos será más suave y […]
BolsasTras la vuelta del periodo vacacional, y un agosto marcado por las subidas bursátiles cabe preguntarse qué deparará el mes de septiembre a los mercados. Sobre todo, después de que la Reserva Federal se mostrara especialmente cauta en la reunión de Jackson Hole y dejara entrever que la retirada de estímulos será más suave y paulatina de lo que cabría esperar.
Para los expertos de Bank of America “a los mercados les ha gustado la nueva orientación de Powel sobre los tipos, desvinculando las subidas del final del QE”. Sin embargo, según matizan “creemos que la reacción positiva del mercado a las declaraciones de Powell se basa en dos suposiciones clave que podrían resultar inexactas. En primer lugar, que el impacto de la variante Delta de la covid en la economía real sería reducido. Y segundo, que la inflación se estabilizaría a un nivel que la Fed puede aceptar una vez que los efectos temporales desaparezcan”.
Pese al optimismo de agosto, no hay que olvidar la variante Delta y los hechos que están añadiendo más incertidumbre a la vuelta a la normalidad. Las personas vacunadas parecen seguir llevando una alta carga de virus, lo que hace que la inmunidad de rebaño sea un sueño cada vez más lejano. Por eso, habrá que observar cómo va evolucionando y si será necesaria una tercera dosis, como se empieza a plantear. Sin embargo, los expertos consideran que los gobiernos de todo el mundo no volverán a tomar medidas restrictivas y que, por tanto, la recuperación llegará aunque sea más paulatinamente.
Para Thomas Hempell, Jefe de Análisis Macro y de Mercado de Generali Insurance AM, “el impulso fiscal en EE. UU. disminuirá en los próximos trimestres, pero han aumentado las posibilidades de que el Congreso acabe acordando un paquete bipartidista de infraestructuras de 1 billón de dólares y una versión (modificada) del nuevo paquete presupuestario de 3,5 billones de dólares de Biden. La Reserva Federal tiene previsto empezar a reducir su programa de flexibilización cuantitativa en el cuarto trimestre. Pero el presidente Powell también subrayó en su intervención en Jackson Hole que el listón para subir los tipos será claramente más alto. El BCE podría retrasar cualquier decisión de reducción de su programa PEPP hasta el cuarto trimestre o incluso el próximo año”.
Otra preocupación en el mercado se encuentra en China, que ha iniciado una nueva oleada regulatoria que ha afectado gravemente a los gigantes tecnológicos del país, como Alibaba o Tencent. En su conjunto, han perdido 3 billones de capitalización bursátil debido a esta presión regulatoria.
Pese a ello, Stéphane Monier, Chief Investment Officer de Lombard Odier, asegura que “el impulso de un nuevo marco normativo se reducirá en un plazo de seis a doce meses, a medida que China entre en una fase de cumplimiento y las empresas se adapten. En particular, las empresas que aún no están en el punto de mira pasarán a cumplir las normas para evitar una atención más perjudicial. Tampoco esperamos que este impulso regulador, que llena un vacío donde antes había poco, dé un giro aún más dramático hacia la nacionalización”.
Además de lo señalado anteriormente, la situación crítica de Afganistán y sus posibles consecuencias en la política internacional sigue siendo un punto que los inversores no deben pasar por alto. De igual manera, la escasez de componentes continua siendo un problema para las empresas tecnológicas y automovilísticas, de hecho es algo que está frenando la recuperación.
Jackson Hole afianza la recuperación bursátil y dispara los activos de riesgo
Powell no se pronuncia sobre el inicio del tapering pero sí evalúa la situación ante la Delta