La inflación en España se ha disparado este mes de marzo hasta un 9,8%, marcando así un nuevo máximo que no veíamos desde el año 1985. Así lo especificó el miércoles el Instituto Nacional de Estadística en su Informe (INE) con su indicador adelantado. La cifra que supone un aumento claro desde el 7,6% que […]
La inflación en España se ha disparado este mes de marzo hasta un 9,8%, marcando así un nuevo máximo que no veíamos desde el año 1985. Así lo especificó el miércoles el Instituto Nacional de Estadística en su Informe (INE) con su indicador adelantado. La cifra que supone un aumento claro desde el 7,6% que marcaban el IPC en el mes de febrero.
Según concreta el INE, la subida de precios ha sido generalizada, debido a que mayoría de los componentes estudiados reflejan encarecimiento. En particular, se subrayan la electricidad, los carburantes, combustibles, así como alimentos y bebidas no alcohólicas siendo además, tal y como concreta Calviño, la guerra en Ucrania responsable en gran parte de este aumento del IPC.
Según los analistas, este dato inflacionario de nuestro país ha superado a la previsión augurada. “Pese a que se esperaba un dato elevado, algo que ya advertía el Gobernador del Banco de España ayer mismo, lo cierto es que el dato ha superado las peores expectativas que ya anticipaban un potencial 8.1%”, indica Pablo Gil, estratega jefe de XTB.
Y concreta: “Arrastramos una tendencia muy mala desde hace varios trimestres. Nos enfrentamos a niveles de precios que no se experimentaban desde principios de la década de los 80s. Hay una pequeña diferencia entre entonces y ahora, y es que los tipos de interés entonces rondaban el 15% y ahora están al 0%, porque según el BCE, se trata de un problema “transitorio” y no hay que alarmarse”.
Fuente: INE
Ante este panorama, y debido a que en nuestro país hemos asistido a importantes alzas de los precios también en enero y febrero, cabe preguntarse cuáles son las perspectivas que nos aguarda nuestro país en la materia.
“Para el conjunto del 2022 cabe esperar que la tasa de inflación supere el 5%, incluso en un escenario de convergencia gradual hacia el objetivo de inflación del BCE del 2% a finales de año. En cambio, en un escenario de continuación de las presiones en línea con los tres primeros meses del año, la tasa de inflación anual se situaría en promedio en el 8%”, explican Jakob Suwalski y Giulia Branz, analistas de calificaciones soberanas y del sector público de Scope Ratings.
Los expertos, haciendo referencia también a los planes del Gobierno español para hacer frente a la energía así como los discutidos en el ámbito europeo, concretan: “En general, esperamos que la consolidación fiscal tras el impacto provocado por la pandemia se retrase un poco por el conflicto, aunque el efecto sobre la ratio deuda/PIB dependerá de cómo la elevada inflación se traduce en un menor crecimiento del PIB real y en mayores costes de financiación”.
“Tras una revisión preliminar de nuestras previsiones de crecimiento, esperamos un crecimiento económico para la economía española del 4,0-4,5% en 2022, seguido de un 2,0-3,0% en 2023”, insisten desde Scope Ratings y añaden: “Las subidas de tipos por parte del BCE en la situación actual no podrían abordar directamente los efectos inflacionistas relacionados con las subidas de los precios de la energía. Por lo tanto, esperamos que el BCE actúe con flexibilidad, en línea con sus mensajes recientes, dando pasos hacia la normalización de la política monetaria a través de una reducción gradual de las compras de activos, adaptándose al mismo tiempo a la evolución de las circunstancias económicas”.
Pero pese a que los datos son alarmantes en nuestro país, el miércoles también conocimos que en Alemania, el IPC se situó en un 7,3 % interanual y el 2,5 % intermensual, más de un 1 % por encima de lo previsto y casi un 2 % más que en febrero.
En el caso de Francia, los datos también mostraron incremento de sus precios, aunque con una situación menos grave que la del resto de países del entorno. El jueves las cifras del país galo del IPC se situaron al alza, con un 4,5 % interanual y un 1,4 % intermensual.
Y con esta situación en el viejo continente, la presidenta del Banco Central Europeo, Christine Lagarde, señaló el mismo miércoles que había importantes riesgos para el crecimiento y puso de manifiesto la considerable incertidumbre sobre las perspectivas.
“Aunque la presidenta del banco central ha rechazado hasta ahora la idea de estanflación, la noticia de ayer de que Alemania y Austria han dado los primeros pasos formales hacia el racionamiento del gas no ha hecho sino exacerbar aún más los temores de estanflación”, recalcan los expertos de Monex Europe, y añaden: “Si los suministros rusos siguen siendo insuficientes y fracasa el intento de satisfacer la demanda con suministros alternativos, el gobierno impondrá restricciones a los fabricantes alemanes de la red de gas y reservará ese gas para los hogares en su lugar”.
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