El Consejo de Supervisión del Banco Central Europeo celebrará su próxima reunión ordinaria en Madrid este jueves y viernes, 24 y 25 de mayo, en las oficinas centrales del Banco de España. Será la segunda vez que este encuentro tenga lugar lejos de Frakfurt, sede de la institución monetaria de la eurozona, después de la […]
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| 04 jun 2018
El Consejo de Supervisión del Banco Central Europeo celebrará su próxima reunión ordinaria en Madrid este jueves y viernes, 24 y 25 de mayo, en las oficinas centrales del Banco de España. Será la segunda vez que este encuentro tenga lugar lejos de Frakfurt, sede de la institución monetaria de la eurozona, después de la reunión que se celebró el año pasado en Helsinki.
“Nos complace reunirnos en Madrid, donde tiene su sede otra de nuestras autoridades nacionales de supervisión, las cuales son parte integrante de la supervisión europea y contribuyen de forma esencial al Mecanismo Unico de Supervisión”, declaró Danièle Nouy, presidenta del Consejo de Supervisión.
Por su parte, Javier Alonso, miembro del Consejo de Supervisión y subgobernador del Banco de España, señaló que “es un honor” acoger la reunión del Consejo de Supervisión en España, destacando que esta reunión “demuestra la estrecha cooperación y los sólidos vínculos entre los supervisores de toda la zona del euro”.
Entre los próximos retos del BCE está decidir cuándo aplicar la primera subida de tipos de interés desde 2011. Factores como el constante incremento del precio del barril de petróleo y de la inflación, la depreciación de un 5% del euro respecto a los máximos de abril y las incertidumbres políticas en Italia, país natal del presidente del BCE Mario Draghi, podrían motivar una subida anticipada.
Además, está sobre la mesa la sucesión de Draghi, que se producirá en octubre de 2019. Una vez resuelta la elección de un vicepresidente, que recayó en el español Luis de Guindos, el presidente del Bundesbank, Jens Weidmann, ha reconocido públicamente sus intenciones de suceder a Draghi. Para ello, podrá hacer valer el apoyo de varios socios de la eurozona, entre ellos España, a quien prestó su apoyo en la elección de Guindos.
Weidmann ya ha dejado claras sus intenciones y ha defendido que el fin del programa de estímulos a través de las compras de deuda a finales de este año, al tiempo que ha sugerido que es necesario fijar ya una fecha definitiva para su cierre.