El propósito que Elon Musk anunciaba en agosto en su cuenta de Twitter ha provocado un efecto curioso en las acciones de su empresa. Precisamente fue ese anuncio, el de sacar Tesla de bolsa, el que ha dado pie a que saliera de la empresa que él mismo fundó y que, a día de hoy, ha recuperado la salud en lo que a la cotización en bolsa se refiere.

En un primer momento, una vez los rumores acerca de Musk se extendieron este pasado viernes, las acciones perdieron en torno a un 14% de su valor. La reacción del fundador de Tesla fue renunciar a su cargo para proteger la posición de su empresa y la bolsa ha tomado buena nota de ello. De hecho, ha alcanzado su valor más alto en el último mes, en torno a los 310 euros por acción, aumentando su precio por acción en un 17% con respecto a los 264 euros de valor mínimo que marcó el viernes.

Como ya publicó DIRIGENTES, esos mensajes en Twitter provocaron la apertura de una investigación por parte de la SEC, la autoridad bursátil de Estados Unidos. A raíz de eso, se abrió una causa por fraude que finalmente se ha cerrado con el pago de Musk de 40 millones de multa y con su renuncia a presidir Tesla durante los tres próximos años.

En concreto, el anuncio de Musk de que existían inversores dispuestos a ofrecer mayores precios por acción de los que marcaba el mercado hizo que el precio de los títulos se elevara durante un tiempo, un hecho que la SEC consideró como fraudulento.

General Electric también eleva su cotización

En paralelo, se anunció la salida de John Flannery, su presidente y consejero delegado para ser sustituido por H. Lawrence Culp Jr., anterior director ejecutivo y presidente de Danaher Corporation. Los inversores acogieron con los brazos abiertos la noticia, dado que después del anuncio las acciones de General Electric se revalorizaron un 7%.