La transformación disruptiva ocasionada como consecuencia de la pandemia ha impactado frontalmente en los modelos de gestión empresarial. Entendidos como uno de los retos principales al que deben hacer frente las compañías para alcanzar el éxito, la innovación, el emprendimiento o la sostenibilidad se posicionan como algunos de los pilares fundamentales. “Las limitaciones y la […]
NacionalDirigentes Digital
| 30 mar 2021
La transformación disruptiva ocasionada como consecuencia de la pandemia ha impactado frontalmente en los modelos de gestión empresarial. Entendidos como uno de los retos principales al que deben hacer frente las compañías para alcanzar el éxito, la innovación, el emprendimiento o la sostenibilidad se posicionan como algunos de los pilares fundamentales. “Las limitaciones y la modificación de las reglas de juego en muchos sectores han provocado un cambio forzado”, comenta el presidente de la Cámara de Madrid, Ángel Asensio, quien expone que la situación vivida ha acelerado las curvas de aprendizaje.
En este contexto, la formación juega un papel esencial y detalla que en la propia Institución también han sufrido una transformación como consecuencia del coronavirus. “Nosotros mismos en la Cámara hemos vivido en primera persona esta evolución a través de nuestras tres áreas de formación: escuela de negocios, escuela de hostelería y Formación Profesional. De una forma u otra, hemos tenido que adaptarnos a las necesidades del momento, ajustando programas y formas de impartir para poder ofrecer las soluciones que los mercados requerían”, explica al tiempo que apuesta por la formación continuada como mecanismo para sobrevivir y adaptarse a los nuevos mercados.
En el mismo sentido, para el presidente de la Cámara de Madrid, la crisis de la COVID-19 ha provocado la aparición de nuevas tendencias a las que la gestión empresarial deberá adaptarse. Entre ellas menciona el protagonismo del comercio electrónico y el teletrabajo. Englobado en esta línea, Asensio destaca que, si bien la tecnología siempre ha sido importante en el desarrollo de las empresas, ahora “hemos visto cómo la adopción y transformación cultural es esencial para seguir trabajando”.
La innovación, entendida desde este organismo como el ADN que las empresas deben introducir en todos los departamentos, también hace que la competencia, la evolución y las mejoras constantes impliquen que unas empresas se impongan a otras. “Los nuevos modelos de gestión que estamos desarrollando han provocado de forma disruptiva un cambio que ha venido para quedarse”, indica Asensio en una charla con DIRIGENTES. Por ello, a pesar de que para muchos negocios ha supuesto un duro golpe, también señala un planteamiento optimista, ya que para otros “ha sido una forma de cambiar de forma casi inesperada y adoptar formas de trabajo en ocasiones más productivas y eficientes”.
En este último año, muchos sectores han tenido que alterar sus modelos de gestión y, en muchos casos, también se han cambiado las tradicionales fórmulas de trabajo para poder cubrir las necesidades. “Más que evolucionar hemos tenido que saltar, en muchos casos, para poder llegar a los clientes”. Así, es imprescindible estudiar qué elementos se deben mantener y potenciarlos para asegurar una evolución positiva.
A su juicio, estos cambios van más allá de la transformación digital. “Muchos valores evolucionan y tienen que ayudarnos a conseguir un empuje más rápido hacia modelos más sostenibles en la dirección de la agenda 2030 y los ODS”, menciona, al tiempo que anima a apostar más por la calidad que por la cantidad, lo que “favorecerá relocalizar parte de lo deslocalizado y fomentará la reindustrialización en nuestro país”.