Desde la Organización Mundial del Comercio, o el Fondo Monetario Internacional, entre otros organismos, advertían del peligro que corrían las economías de los países que planeaban con imponer aranceles. Así, en la contienda entre Estados Unidos y China, ambos países han debido percibir que no se está desarrollando del todo como preveían, de modo que […]
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| 03 dic 2018
Desde la Organización Mundial del Comercio, o el Fondo Monetario Internacional, entre otros organismos, advertían del peligro que corrían las economías de los países que planeaban con imponer aranceles. Así, en la contienda entre Estados Unidos y China, ambos países han debido percibir que no se está desarrollando del todo como preveían, de modo que aprovecharon la reciente cumbre del G20 para firmar una tregua.
Hasta ahora se han producido reducciones importantes en las compras de los dos países. Por ejemplo, China ha reducido a mínimos las importaciones de crudo desde septiembre. Y no se trata de un descenso gradual, sino de una caída desde los cerca de 700 mil barriles diarios, hasta quedar en torno a los 100 mil.
En medio de esa contienda, se han producido anuncios como el de General Motors, que cerrará fábricas en Estados Unidos, lo que el presidente norteamericano achacó a la orientación pro-china que tomó la empresa en los últimos años. No obstante, uno de los compromisos de China con el nuevo acuerdo es el de reducir los aranceles para los coches que llegaran de Estados Unidos, una tasa que actualmente se encuentra en el 40%.
El acuerdo entre las dos mayores potencias mundiales significa que dejarán de imponerse aranceles mutuos a partir de enero. La respuesta se produce después de que este mes de noviembre se incrementara el déficit comercial de Estados Unidos con respecto a China en un 4,3%.
Ese dato encaja con las tesis de las organizaciones internacionales de que los principales perjudicados en una guerra comercial son quienes imponen aranceles, en contra del planteamiento de Trump, que esperaba aumentar la producción y la compra de productos ‘made in USA’.
Por otra parte, la bandera blanca de estos dos países, también incluye una tregua de 90 días, además de una intensificación de las negociaciones durante ese periodo de tiempo.