La Alianza del Pacífico (México, Colombia, Perú y Chile) emprendió una acción unificada para erradicar de sus economías el plástico de uso único y ampliar la adopción de principios de economía circular y naranja que constan en la Agenda 2030 de Naciones Unidas. Así lo han confirmado los presidentes de esos países en la declaración […]
InternacionalDirigentes Digital
| 18 jul 2019
La Alianza del Pacífico (México, Colombia, Perú y Chile) emprendió una acción unificada para erradicar de sus economías el plástico de uso único y ampliar la adopción de principios de economía circular y naranja que constan en la Agenda 2030 de Naciones Unidas.
Así lo han confirmado los presidentes de esos países en la declaración emitida tras la XIV cumbre, realizada en Lima, donde rubricaron un documento sobre la Gestión Sostenible de los Plásticos que formaliza el compromiso de reconvertir los sectores que utilizan ese material.
MENOS PLÁSTICO, MÁS VIDA
El acuerdo busca “desarrollar e implementar nuevas políticas a fin de promover la gestión integral de los plásticos, reducir la utilización de los plásticos de un solo uso y disminuir estos residuos en los ecosistemas y prevenir la contaminación”, se lee en el comunicado de la asociación.
El documento resulta de la iniciativa que Perú presentó en 2018 en la COP24, en Polonia, para llamar la atención sobre “el creciente flujo y acumulación de los residuos de plástico y microplásticos, así como los riesgos sobre la salud y el ambiente asociados”.
Los representantes peruanos presentaron en aquella oportunidad su propuesta de una acción conjunta con el lema “menos plástico, más vida”. Ahora llegó el aval de los presidentes Andrés Obrador, Iván Duque, Martín Vizcarra y Sebastián Piñera, izquierdista el primero y liberales los demás.
ONDA CONTINENTAL
De esta manera, los países latinoamericanos que presentan las economías más dinámicas actualmente en el Pacífico se comprometen a actuar coordinadamente alineados con medidas ya adoptadas por otros países de la región, entre ellos Brasil, que cuenta con casos de prohibición del uso de plásticos
Como lo mostró DIRIGENTES en su edición especial de abril sobre Economía Circular, Brasil es uno de los países latinoamericanos donde, además de la incipiente adopción de la economía circular por parte de diversas industrias, se observa también un estímulo público a este modelo.
Allí, la icónica ciudad turística de Río de Janeiro, por ejemplo, eliminó en 2018 el uso de pajitas plásticas en restaurantes, hoteles, bares y demás establecimientos. Otras ciudades también adhirieron a la medida, mientras que cadenas como Starbucks y McDonald’s implementaron procesos para su eliminación.
CAMBIO DE SISTEMA
São Paulo, el más grande ayuntamiento del país, con 12 millones de habitantes, aprobó en febrero último una legislación en el mismo sentido y fijó multas de hasta 1800 euros y el cierre del local para los casos de reincidencia de infracción a la nueva normativa.
Los locales pueden ofrecer pajitas de papel reciclable, comestible o biodegradable o envasadas en material de idénticas características. El propósito es erradicar los objetos plásticos de “uso único”, como cubiertos y vasos descartables, según anticiparon los autores de la ley.
Abiplast, la cámara de fabricantes de plásticos, cuestionó la medida proponiendo “discutir más allá del material, abordando el descarte correcto”, haciendo patente así la fricción que innovaciones como la ahora emprendida por la Alianza del Pacífico provocan en sectores industriales más tradicionales.