Englobada en el actual ecosistema, la financiación alternativa ha ido poco a poco escalando posiciones hasta convertirse en otro punto más de apoyo de las organizaciones y un complemento a la tradicional financiación bancaria en el balance de estas. En este contexto, algunas iniciativas como Findango Finance están comenzando a jugar un papel relevante en […]
Dirigentes Digital
| 29 oct 2021
Englobada en el actual ecosistema, la financiación alternativa ha ido poco a poco escalando posiciones hasta convertirse en otro punto más de apoyo de las organizaciones y un complemento a la tradicional financiación bancaria en el balance de estas. En este contexto, algunas iniciativas como Findango Finance están comenzando a jugar un papel relevante en este escenario al facilitar el acceso a fondos e incrementar la estabilidad de las empresas.
La CEO y fundadora de este proyecto, Mar Turrado, explica que la importancia de su existencia cobró fuerza durante la crisis económica de 2007 y, a partir de ese momento, se convirtió en un elemento fundamental para las organizaciones. “Es la única forma que tienen la gran mayoría de ellas para poder diversificar sus fuentes de financiación y no depender solo de la banca”, comenta al tiempo que afirma que la dependencia de un solo tipo de proveedor financiero “puede poner a las empresas en riesgo de concurso o de desaparecer en determinadas circunstancias”.
Fidango Finance comenzó a operar hace cerca de dos años y, desde su nacimiento, mantiene el objetivo de ofrecer fondos en forma de productos financieros a corto plazo, “de forma fácil, rápida y flexible”. En este sentido, teniendo en cuenta los diferentes patrones de comportamiento que presentan la financiación bancaria y la alternativa, su propuesta da la posibilidad a las empresas de “conseguir fondos cuando la banca no llega o mientras se reestablecen las líneas bancarias a nuevos niveles necesarios”.
Así, según detalla su CEO, su modus operandi funciona de la siguiente manera. Primero contactan empresas. Después ven sus necesidades de financiación, estructura de balance y cuenta de resultados. Y, por último, les ofrecen fórmulas para que financien su capital circulante como complemento a sus líneas bancarias.
Para Turrado, los productos genéricos de la banca y de los financiadores alternativos, de los que prevé un continuo crecimiento, son “similares”. Por ello, las ventajas que aportan este tipo de iniciativas a las empresas que se encuentran en plena búsqueda de financiación ante descuento de pagarés, anticipo de facturas o contratos, entre otras posibilidades, residen en la “no dependencia de un solo tipo de proveedor”, así como la “flexibilidad” y la “agilidad” que ofrecen.
De este modo, explica que, con relación a estos dos últimos elementos, la flexibilidad es importante en la medida en que cada organización tiene sus necesidades particulares, de forma que “los productos se tienen que adaptar a los clientes, no los clientes a los productos de las entidades”. Por su parte, la rapidez la considera como algo “básico”, debido a las necesidades imprevistas a las que tienen que hacer frente y, también, porque los dirigentes “deben obtener soluciones y respuestas rápidas que no les hagan perder tiempo”.
En última instancia, respecto a los bloques con los que trabajan, la devolución de estos préstamos no difiere de los de la banca tradicional. Por ello, lo que marca la diferencia es su combinación: “La flexibilidad está más del lado de la financiación alternativa y el coste bajo del de la banca tradicional”, matiza.
Los dirigentes se ponen metas más allá del crecimiento económico