Verano negro para el sector turístico nacional. La apertura de fronteras tras el levantamiento de las restricciones a la movilidad no ha conseguido impulsar los viajes a España, en un contexto en el que los rebrotes han provocado que una multitud de países se sumen a la recomendación oficial de no pisar este país o […]
NacionalDirigentes Digital
| 01 sep 2020
Verano negro para el sector turístico nacional. La apertura de fronteras tras el levantamiento de las restricciones a la movilidad no ha conseguido impulsar los viajes a España, en un contexto en el que los rebrotes han provocado que una multitud de países se sumen a la recomendación oficial de no pisar este país o la imposición de una cuarentena a la vuelta. Así, los datos publicados este martes por el Instituto Nacional de Estadística (INE), arrojan que España recibió 2,5 millones de visitantes extranjeros durante el mes de julio, lo que supone un descenso del 75% con respecto al mismo periodo del año anterior.
Francia se ha convertido en el principal país emisor en el séptimo mes del año, con la llegada de 597.244 personas (-58,4%), seguido de Alemania (432.302 personas) y Reino Unido (377.886 personas), cifras que, en cualquier caso, son un 65,2% y un 82,5% menores en comparativa anual. Destacan también Países Bajos (-189.995 personas) y Bélgica (-154.826 personas). Estos datos reflejan la evolución de la pandemia a nivel europeo y global, así como la falta de confianza que suscita este país al resto del mundo.
En el acumulado de los siete primeros meses del año, la cantidad de personas foráneas que han visitado este país asciende a 13,2 millones, con una reducción del 72,4%. Entre enero y marzo (mes en el que se declaró el estado de alarma) la cifra de turistas se situaba en los 10,58 millones de personas. Para hacerse una idea del freno en seco que ha experimentado la industria de los viajes, casi 48 millones de personas habían visitado España a finales del mes de julio del año pasado.
Fuente INE
La costa mediterránea concentra el grueso con Islas Baleares a la cabeza. El archipiélago se ha convertido en el principal destino con una cuota del 23,9% sobre el total, por delante de Cataluña (17,7%) y Comunidad Valenciana (15,5%). Pese a ello, las tres registran caídas significativas. Cabe destacar que si bien la mayoría (2,1 millones) vinieron a pasar las vacaciones, 96.001 personas lo hicieron por motivos profesionales, mientras que el resto no especificaron las causas.
Fuente: INE
En esta línea, el desembolso medio por turista también ha caído hasta los 994 euros (-17,8%), al tiempo que el gasto diario medio ha sido de 123 euros (-23,3%). En conjunto, el gasto total ha bajado un 79,5%, con 2.450 millones. Lo único que sube es la duración media de la estancia que alcanza los 8,1 días en comparación con la media de julio de 2019.
Con la temporada turística por perdida, la última actualización realizada por Exceltur, lobby que aglutina las principales empresas del sector, estima una caída de la actividad para este ejercicio de 98.753 millones, alrededor de 15.000 millones más de lo que previsto en junio antes del aumento de los contagios. “Tras una muy lenta y paulatina apertura de la temporada turística en julio y las últimas y múltiples restricciones en cascada, impuestas sin criterios homogéneos a nivel UE (…), los datos de ventas y cancelaciones disponibles la primera quincena de agosto, revelan un aplanamiento de la ya de por sí lenta reactivación prevista a mitad de junio, y apuntan al cierre anticipado de la temporada veraniega”, aseveran.
Exceltur anticipa un descenso de 36.638 millones para el tercer trimestre y de 18.655 millones para el cuarto, que se suman a las pérdidas de 43.460 millones contabilizadas entre marzo y junio, con su correspondiente repercusión en el empleo. En concreto, en julio se registraban 823.000 trabajadores menos que en 2019, bien porque estaban en ERTE (517.000) o por las caídas de la contratación. “Estos cada día más devastadores resultados, sitúan al sector turístico español como el más dañado de todos los sectores de la economía española al no haber podido producir, almacenar, ni vender sus servicios durante meses. Por ello, y como ya se anticiparon varios comisarios europeos que iba a suceder, sugirieron asignar al turismo en toda Europa no menos de un 25% del total de fondos del Plan Next Generation de la UE”, sentencian.