Los principales países del mundo tenían hasta hace bien poco el acelerador pisado a fondo. La demanda y la producción se encontraban en niveles similares a los de antes de la pandemia, pero eso ha cambiado tras las turbulencias por la invasión rusa de Ucrania. Las economías siguen creciendo y aumentando su tamaño, pero el […]
NacionalDirigentes Digital
| 11 abr 2022
Los principales países del mundo tenían hasta hace bien poco el acelerador pisado a fondo. La demanda y la producción se encontraban en niveles similares a los de antes de la pandemia, pero eso ha cambiado tras las turbulencias por la invasión rusa de Ucrania.
Las economías siguen creciendo y aumentando su tamaño, pero el impulso que tenían hace dos meses ya no está. El pie sigue pisando el acelerador, pero no llega hasta abajo del todo. Así lo demuestran los datos del indicador adelantado compuesto, o el OECD Composite leading indicator (CLI), en inglés. Esas cifras demuestran que la actividad económica ha cambiado de tendencia, de modo que se ha producido “una pérdida de impulso del crecimiento en Europa”, si bien apunta a crecimiento estable en otras grandes economías de la OCDE.
Europa resulta la principal damnificada por la situación bélica y así lo corroboran los datos de la OCDE. Reino Unido y la zona euro, incluidos Alemania, Francia e Italia, sufrirán una pérdida del impulso que arrastraban hasta ahora, sobre todo por culpa de la pérdida de confianza de los consumidores y la inflación desbocada.
Sin embargo, Estados Unidos, Japón y Canadá mantienen su tendencia de crecimiento, al igual que China y la India, mientras que Brasil afronta una desaceleración de expansión económica.
En todo caso, la OCDE advierte de que los indicadores disponibles llegan hasta marzo de 2022 y que los datos que hay hasta ahora sufren unas fluctuaciones más altas de lo habitual. Para la OCDE, el informe que ha hecho público hoy es más una señal de que la tendencia se invierte, aunque sea difícil calcular cuál es la medida exacta.
Los datos concretos son los siguientes: el indicador adelantado en marzo para el conjunto de la OCDE se situó en 100,30 puntos, solo ocho centésimas en un mes. No obstante, la cifra para la eurozona sufre una reducción algo mayor, desde los 100,60 puntos de febrero, hasta los 100,43 de marzo.
En el caso concreto de España, se encuentra bastante por encima de la media de este grupo de países. El CLI se situó en marzo en 101,11 puntos, si bien se redujo en 0,16 puntos en solo un mes.
Las cifras de otros países reflejan esa pérdida de impulso en Reino Unido (de 100,9 a 100,6), Alemania (de 100,8 a 100,6) e Italia (de 101 a 100,8). En el caso de Estados Unidos, los datos apuntan a que el crecimiento se mantiene estable (100,1).