La actualidad económica ha puesto en el foco una preocupación latente para muchos ahorradores: el impacto de la inflación sobre sus ahorros que no generan rendimientos. Es una realidad que el dinero parado, sin rentabilizar, pierde poder adquisitivo con el tiempo. Pero, ¿cómo enfrentar esta situación sin comprometer la seguridad del fondo de emergencia o […]
NacionalDirigentes Digital
| 29 ago 2023
La actualidad económica ha puesto en el foco una preocupación latente para muchos ahorradores: el impacto de la inflación sobre sus ahorros que no generan rendimientos. Es una realidad que el dinero parado, sin rentabilizar, pierde poder adquisitivo con el tiempo. Pero, ¿cómo enfrentar esta situación sin comprometer la seguridad del fondo de emergencia o del dinero destinado a imprevistos?
Por definición, el fondo de emergencia está destinado a cubrir gastos inesperados, lo que implica que debe ser líquido y fácilmente accesible. Sin embargo, no tenerlo rentabilizado podría llevarnos a perder parte de su valor real año tras año. Por ello, la tarea es encontrar alternativas que, sin comprometer su liquidez, nos permitan al menos defenderlo de la inflación.
Muchos ahorradores buscan opciones para donde invertir el dinero parado con el objetivo de obtener algún rendimiento, pero sin querer asumir grandes riesgos en el proceso. Vamos a analizar las que se consideran más atractivas para los ahorradores en esta delicada fase de la economía.
Estas cuentas son una excelente opción para quienes buscan rentabilidad con bajo riesgo. Aunque las tasas ofrecidas no son exorbitantes, superan con creces las de las cuentas de ahorro convencionales. Permiten un fácil acceso al dinero, y en muchos casos, la posibilidad de realizar retiros sin penalizaciones.
Estos instrumentos financieros ofrecen una rentabilidad previamente acordada, lo que los hace predecibles. Al vencer el plazo, el capital se devuelve junto con los intereses generados. Son adecuados para quienes buscan seguridad y no desean preocuparse por las fluctuaciones del mercado.
Para aquellos dispuestos a asumir un ligero aumento en el riesgo, las inversiones de corto plazo, como los fondos de mercado monetario, pueden ser una buena elección. Estas inversiones, al tener un horizonte temporal reducido, tienden a ser menos volátiles que las inversiones a largo plazo.
Según las referencias de Carlos Galán, MyInvestor presenta una gama de productos que se adaptan a distintos perfiles de inversión. Aunque no todos son aptos para el fondo de emergencia, ciertamente ofrecen opciones conservadoras que podrían ser adecuadas.
Invertir una pequeña porción del fondo en activos con un perfil de riesgo más elevado puede ser una estrategia para aumentar la rentabilidad global. Esta diversificación debe hacerse con cautela, garantizando que la mayoría del fondo permanezca líquido y accesible.
Entre los consejos adicionales a considerar, es esencial destacar la importancia de la investigación. Antes de decidir dónde invertir el dinero parado, es crucial investigar las opciones disponibles y entender completamente los términos y condiciones asociados. Además, aunque pueda resultar tentador optar por inversiones que prometan una rentabilidad más alta, es vital recordar siempre la finalidad del fondo de emergencia para no comprometer su accesibilidad. Finalmente, dada la dinámica del contexto económico y financiero, es recomendable hacer una revisión periódica de nuestras inversiones y adaptarlas según las circunstancias del momento.
No rentabilizar el dinero puede representar un costo oportunidad significativo en el largo plazo. Afortunadamente, existen diversas alternativas que nos permiten combatir los efectos de la inflación sin comprometer la seguridad de nuestros ahorros. Con una adecuada planificación y una estrategia clara, es posible defender y, en algunos casos, incrementar el valor real de nuestro fondo de emergencia.