Para la sociedad acceder a una casa cada vez es más difícil. Esta es una de las principales conclusiones del II Informe sobre la capacidad de acceso a la vivienda de las familias españolas, elaborado por la cadena de intermediación inmobiliaria Century 21, del que se extrae que el precio es cada vez mayor y en algunas ciudades como Madrid o Barcelona, el tamaño debe ser menor para que los compradores puedan cumplir con el presupuesto recomendado del 33% de los ingresos familiares. 

Para analizar este estudio, la compañía ha realizado una comparativa entre los datos que aportó en su primer informe de 2018 y los obtenidos en 2022, a través de un análisis de 15 ciudades españolas. En lo que respecta a la compra de una vivienda, el esfuerzo necesario ha aumentado como consecuencia de la subida de los tipos de interés y el incremento de la inflación. Barcelona y Mérida destacan por ocupar la primera y última posición a la hora de estudiar la cuota necesaria para comprar una casa de 90 metros cuadrados en cada una de ellas. Así, en la Ciudad Condal esta cuota asciende hasta los 1,402 euros, lo que supone una tasa de esfuerzo del 34%, mientras que en la capital extremeña la cuota se sitúa en los 286 euros y la tasa de esfuerzo en el 16%.

Tal y como destaca el documento, en Barcelona la tasa de esfuerzo ha crecido seis puntos porcentuales. En 2018 se encontraba en el 28% y suponía una tasa de esfuerzo de 866 euros. Además, actualmente supera en un punto el límite recomendado del 33%. De hecho, tal y como refleja el informe, ya hay tres ciudades que superan la barrera del 30% en la tasa de esfuerzo: Palma de Mallorca, con un 33%, y Madrid y Bilbao, ambas con un 31%. Por su parte, Mérida también ha visto empeorar su situación. Ha pasado de una cuota mensual de 159 euros mensuales en 2018 hasta los 286 euros en 2022. Es decir, su tasa de esfuerzo ha crecido del 10% al 16% en este periodo. 

¿Qué ocurre en el alquiler?

Con relación a la situación del mercado del alquiler, el análisis sobre el acceso a la vivienda elaborado por Century 21 confirma la misma tendencia que en el escenario de la compra. En este caso, Valencia se erige como la ciudad que ha experimentado el crecimiento más significativo: en el año 2018 alquilar una casa de 90 metros cuadrados suponía una mensualidad de 725 euros, mientras que en 2022 esta cantidad ya alcanzaba los 927 euros, lo que supone un incremento del 28% en cuatro años.

De las 15 ciudades analizadas, en cuatro de ellas el alquiler de una vivienda es una opción más asequible que la compra. Estas son Palma de Mallorca, Pamplona, La Coruña y Bilbao. En este sentido, los tipos de interés de la financiación de la compra de una vivienda han provocado la pérdidad de competitividad de la compra frente al alquiler. Por su parte, Mérida se posiciona como el territorio donde la renta mensual destinada a la compra de una vivienda presenta el mayor ahorro con respecto al alquiler: -39%.