El periodo inflacionista que empezó hace más de dos años han supuesto un aumento de los costes de producción para las empresas. Los problemas en la cadena de suministros, en un primer momento, seguido de las consecuencias en los precios de la energía por la invasión rusa de Ucrania han supuesto un nuevo reto para […]
NacionalDirigentes Digital
| 30 ago 2023
El periodo inflacionista que empezó hace más de dos años han supuesto un aumento de los costes de producción para las empresas. Los problemas en la cadena de suministros, en un primer momento, seguido de las consecuencias en los precios de la energía por la invasión rusa de Ucrania han supuesto un nuevo reto para las empresas cuando la economía todavía no se había recuperado de los de las consecuencias de las restricciones impuestas para hacer frente a la pandemia. Asimismo, el propio tejido empresarial es responsable de parte del aumento de precios. Según el Fondo Monetario Internacional (FMI), los beneficios corporativos han sido responsables del 45% de la inflación desde principios de 2022. Ahora, un reciente informe sobre le Banco de España analiza la traslación del aumento de los costes de producción a los precios de los productos y servicios.
Una de las principales conclusiones del estudio es la diferencia registrada entre sectores. En aquellos en los que los precios han sido históricamente más rígidos, la trasmisión de precios se habría producido una manera más lenta y menos intensa.
Así, el sector de la energía es, con diferencia, el que más se ha beneficiado del periodo inflacionista vivido en los últimos dos años. Estas son las que más han aumentado los precios de venta en relación con el aumento que han sufrido en los costes de producción entre 2019 y 2022. El informe calcula el aumento del precio de venta de las empresas de energía eléctrica, gas y vapor en un 89% en los tres últimos años, mientras que el incremento de los costes de producción se sitúan en el 57%. En el caso de las empresas de refino, el aumento ha sido del 67% y 50%, respectivamente.
Esta coyuntura favorable en el sector se vio reflejada en la presentación de resultados del año pasado. Endesa, Naturgy, Iberdrola y Repsol han aumentado su beneficio neto un 77%, 36%, 12% y 70%, respectivamente.
La situación es radicalmente distinta en el resto de los sectores económicos. Pese a que otros también han sacado provecho de la inflación, lo hacen a mucha distancia de los dos primeros, siendo el beneficio mínimo. Entre estos, se encuentran el transporte y almacenamiento, la hostelería y restauración y el comercio mayorista.
El resto de sectores analizados en el informe mantienen la relación entre los dos incrementos, incluso algunos pierden rentabilidad. Es el caso de la agricultura y ganadería, industria química, alimentos y textil, información y comunicaciones e industrias extractivas
