Hasta este lunes, pedir prudencia y sentido común era lo único que el Gobierno pretendía hacer para frenar la expansión del coronavirus. No obstante, esta semana ha marcado un antes y un después en el modo en el que las autoridades españolas están enfrentando la crisis sanitaria, de manera que lo que antes era cautela […]
NacionalDirigentes Digital
| 10 mar 2020
Hasta este lunes, pedir prudencia y sentido común era lo único que el Gobierno pretendía hacer para frenar la expansión del coronavirus. No obstante, esta semana ha marcado un antes y un después en el modo en el que las autoridades españolas están enfrentando la crisis sanitaria, de manera que lo que antes era cautela y vigilancia ahora son medidas concretas.
La ministra de Hacienda y portavoz del Gobierno, María Jesús Montero, expresó este martes que el coronavirus es “un desafío global” que necesitará una aplicación de medidas coordinadas a nivel mundial. Este principio es el que llevó a los presidentes de gobierno europeos a reunirse por videoconferencia para decidir qué hacer ante este problema.
En todo caso, dicha conferencia no sirvió para adelantar decisiones concretas, si bien el presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, avanza que la Comisión Europea y el Banco Central Europeo anunciarán medidas importantes en los próximos días. Por su parte, Sánchez espera poner en marcha un nuevo paquete de medidas, en concordancia con los sindicatos y la patronal, con quienes se reúne este jueves. En particular, el Plan Económico de Choque atenderá a cuatro aspectos.
No obstante, dichas medidas se añadirán a las que ya se han iniciado.
A última hora del lunes se conoció el cierre de los centros educativos en los lugares en los que el brote está siendo especialmente significativo, esto es, en la Comunidad de Madrid, La Rioja, así como las ciudades vascas de Vitoria y Labastida. Con esa medida, más de 2 millones de estudiantes (1,5 millones en Madrid) no tendrán que acudir a clase desde este miércoles 11, al menos, hasta el 25 de marzo.
Además del cierre de los centros educativos, medida realizada en coordinación con las administraciones locales, el Gobierno presidido por Pedro Sánchez ha anunciado que prohíbe que se reciban vuelos desde Italia hasta España desde este miércoles 11 de marzo hasta el 25 de marzo. En ese sentido, hay que aclarar que no se prohíbe la salida de vuelos hacia territorio italiano.
El ejecutivo español destaca el impacto que ha tenido la pandemia en Italia, donde ya se han tomado medidas extraordinarias. Además, en la medida publicada en el BOE, se justifica la prohibición por el importante peso que tienen las conexiones aéreas italianas en el cómputo del transporte aéreo en nuestro país.
En concreto, el 9% del tráfico aéreo internacional español procede de Italia, con 16 millones de pasajeros y más de 106 mil operaciones comerciales registradas durante 2019. En ese sentido, el ejecutivo defiende la prohibición diciendo que “la gran mayoría de los casos importados en nuestro país han sido vinculados a viajeros procedentes de Italia”.
Aunque se barajaba que ciertos encuentros entre equipos españoles y equipos italianos podían jugarse a puerta cerrada, no había trascendido que el resto se fueran a ver afectados. No obstante, según ha explicado el ministro de Sanidad, Salvador Illa, los eventos deportivos de competiciones nacionales e internacionales se disputarán sin público. En ese sentido, Illa ha explicado que la medida se aplicará a todos los niveles, pero precisa que se refiere sobre todo a aquellos con “una gran afluencia” de público, en particular las competiciones de fútbol profesional, LaLiga Santander y SmartBank, así como las de baloncesto, la Liga ACB.
Las otras dos medidas concretas que aprobó el Consejo de Ministros afectan, por un lado, a un grupo de riesgo y, por otro, a las zonas más afectadas. En el primer caso, se ha decretado la suspensión de los viajes del Imserso durante el próximo mes, ya que el equipo de gobierno entiende que es prioritario “evitar desplazamientos de un grupo de población frágil”, como el que realiza este tipo de viajes.
Por otro lado, se cancelan “actividades colectivas en espacios cerrados” con afluencia de más de 1.000 personas en las zonas de riesgo (Comunidad de Madrid, La Rioja, Vitoria y Labastida). Aunque Illa no ha realizado más precisiones, se entiende que con esta fórmula el gobierno se refiere a actividades tan dispares como conciertos o teatros, pero no se especifica si afecta a ferias y congresos. Asimismo, se obliga a que se reduzca a un tercio el aforo en los eventos con una asistencia de menos de 1.000 personas, con el objetivo de “evitar una masificación excesiva de personas en espacios cerrados”.
En cuanto a próximos eventos como pueden ser la Semana Santa o la Fallas, desde el Gobierno se arguye que se estudiará cada caso con la autoridad regional competente. De momento, la Generalitat Valenciana anunció a última hora del martes que se aplazan los actos festivos por las Fallas.
A propuesta del ministro de Seguridad Social, José Luís Escrivá, se ha aprobado mediante un Real Decreto-Ley que los trabajadores que hayan permanecido o vayan a permanecer en aislamiento preventivo se consideren de baja por accidente laboral. Esto significa que el status para las personas aisladas e infectadas mejora, puesto que percibirán el 75% de la base reguladora desde el día siguiente al que se confirma la baja laboral, a cargo de la Seguridad Social.
En el capítulo de recomendaciones para frenar el coronavirus, se alude al sentido común de la población. En el ámbito laboral se exhorta a favorecer el teletrabajo “siempre que sea posible”, si bien un buen número de empresas se adelantaron a esta recomendación. También se recomienda aumentar la flexibilidad horaria y a escalonar los turnos para “reducir las concentraciones de trabajadores”. Por último, se solicita que se eviten los viajes.