La globalización beneficia más a España que a EE.UU.

776 euros. Esta es la ganancia per cápita anual que la globalización ha reportado a los habitantes españoles entre el período 1990-2016. Teniendo en cuenta que el más beneficiado a lo largo de este tiempo ha sido Suiza con 1.805 euros anuales, la clasificación sitúa a España en el puesto número 25 a nivel global, por delante incluso de la EE.UU. (35) o China (39).

El estudio, publicado por la fundación alemana Bertelsmann Stiftung y recogido por Statista, se da a conocer en una semana clave, donde las siete mayores economías mundiales se han reunido durante dos días en Canadá. Un encuentro que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, decidió abandonar antes de su clausura. El magnate norteamericano ascendió al poder respaldado por aquellos ciudadanos que están en contra del mercado único, porque no les favorece. Un mensaje que ha intensificado desde su llegada a la Casa Blanca en enero de 2016. Y los datos parecen indicar que así es.

La mayor economía del mundo solo se ha beneficiado con 445 euros al año por cabeza de esta ‘mundialización’ de la economía, una cifra que le sitúa en el número 35 de 42 en la clasificación. Su principal competidor -China- se encuentra aún más atrás en la lista. Concretamente en la posición 39, solo por delante de México (190 euros), Argentina (170 euros) e India (98 euros).

En cambio, Suiza (1.805 euros), Eslovenia (1.680 euros), Finlandia (1.554 euros), Irlanda (1.449 euros), Grecia (1.448 euros) se encuentran en el ‘top’ cinco’ de países donde su población ha conseguido una ganancia media mayor.

El estudio, realizado a través de una estimación del poder de compra ajustado al de EE.UU. y utilizando datos en relación a los precios del año 2000, evidencia que España se ha integrado menos en el mundo global en comparación con otros países. Una premisa contra la que parece luchar desde el año 2008, cuando comenzó a abrir sus puertas al mercado exterior y con la que ha conseguido alcanzar récord histórico de exportaciones en cada registro.

Con todo ello, al analizar el índice por variables es escenario cambia. Así, mientras que su economía está globalizada en un 48,5%, en materia social (88,1%) y política (96,3%) ocupa el puesto 16 y 6, respectivamente. Probablemente su pertenencia a la Unión Europea sea uno de los factores que le conducen a encabezar los primeros puestos en esta materia. En conjunto, la media le conduce hasta la decimonovena posición, con un 65,98%, una cifra más acorde con las del resto de sus socios comunitarios, siendo Irlanda, el más avanzado en este sentido.

El ranking divide en dos tablas de 21 países el porcentaje de globalización que ha alcanzado cada uno de ellos. Mientras que la primera está ocupada por economías desarrolladas, en la segunda se encuentran principalmente las emergentes, donde también comparten puesto de nuevo con China, EE.UU. e Italia. Quedará por ver si la guerra comercial iniciada por Trump modifica este escenario.