Tras la recesión vivida en 2015 y 2016 la economía brasileña está en fase de recuperación pero ésta es más lenta de lo esperado. Un proceso de reactivación que el banco central del país acompaña con descensos en los tipos desde hace tres años, cuando el precio del dinero en Brasil se encontraba en el 14,25 por ciento.
En la reunión de este miércoles, el organismo ha decidido recortar de nuevo los tipos en cincuenta puntos básicos y dejarlos en el 4,5 por ciento, mínimos históricos. Además, a partir de ahora, la entidad entiende que hay que ser precavido con la política monetaria, por lo que sus próximos pasos van a depender de la evolución de la actividad económica, del balance de riesgos y de las expectativas de inflación.
Evaluación económica
Según el banco central brasileño, “los datos de actividad económica del segundo trimestre indican que el proceso de recuperación de la economía brasileña ha ganado fuerza, en comparación con lo observado hasta el primer trimestre de 2019”. De ahí que su escenario sea el de que esa recuperación continuará a un ritmo gradual.
La entidad monetaria de Brasil reconoce que “el proceso de reformas y ajustes necesarios en la economía brasileña ha avanzado”, pero insiste en que “perseverar en este proceso es esencial para permitir la consolidación de la disminución de la tasa de interés estructural y para la recuperación sostenible de la economía”.
En las últimas horas, Standard & Poor’s ha elevado a positiva desde estable la perspectiva de la nota de la deuda de Brasil, precisamente por las medidas de ajuste fiscal impulsadas por el ejecutivo de Jair Bolsonaro.
2019-12-11 16:09:29