A comienzos del presente mes de diciembre, la OPEP y sus aliados (OPEP+, entre los que destaca Rusia) acordaron hacer un nuevo recorte en la producción mundial de 500.000 barriles diarios. Una medida que se unió al recorte del pasado mes de enero de 2019, cuando recortaron la producción en 1,2 millones de barriles por día. Unas medidas enfocadas a recuperar el precio del crudo, que ha estado relativamente bajo en este curso.
La OPEP y productores aliados encabezados por Rusia, grupo denominado OPEP+, generan más del 40% del petróleo mundial. Arabia Saudí, uno de los miembros fundadores de la OPEP, y Rusia (no miembro) son de lejos los dos mayores productores de la OPEP+, superados solo por Estados Unidos. El grupo, que integra a más de 20 productores, llevará a cabo una reducción conjunta de 1,7 millones de barriles, o un 1,7% de la demanda global.
“Para equilibrar el mercado era necesario un recorte de 500.000 barriles diarios”, dijo el ministro de Energía de Rusia, Alexandr Novak, tras concluir la séptima reunión de la alianza formada por los catorce socios de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) y otros diez productores independientes.
Lo cierto es que el petróleo ha estado durante buena parte del año cotizando por debajo de los 60 dólares, algo que la OPEP quería revertir. Tras los recortes, el precio del barril ha pasado de los 55 a los 66 dólares y parece que mantiene una racha alcista. El crudo terminará el año mucho mejor de lo que terminó 2018, cuando el 26 de diciembre cotizaba en los 50 dólares y los analistas temían que bajase de ese nivel. En los últimos doce meses, el Brent se ha revalorizado un 16%, algo más que el oro.
Mucho más que el Brent se ha revalorizado el WTI, lo ha hecho un 29%, ya que ha pasado de los 45 dólares del pasado mes de diciembre de 2018 a los 60 dólares. Durante el pasado curso, había paralelismo entre ambos barriles, de hecho el WTI solía cotizar 10 dólares por debajo que el Brent. Pero la tónica se ha roto este año.
2019-12-20 11:49:12