Avanzan a un ritmo tan vertiginoso que apenas da tiempo a ser consciente de su veloz expansión. Las compañías de alto crecimiento o gacela se denominan así por su semejanza con este animal: son pequeñas, ágiles y corren mucho. Aunque los parámetros para catalogarlas como tal varían según los analistas, hay factores inherentes a ellas, y es que crecen muy rápido y lo hacen por encima de la media. 

En este sentido, los requisitos de Iberinform para ello son: haber sido creada hace menos de cinco años, lograr generar más de diez empleos, facturar por encima del medio millón de euros y haber acumulado crecimientos anuales superiores al 20% en los últimos tres años.

Si bien se trata de algo poco habitual, en España existen, aunque parece que cada vez se avistan menos. Según la información mercantil recabada por Insight View, herramienta de Iberinform, a cierre del último ejercicio a nivel nacional existían 480 negocios gacela, lo que supone un descenso interanual del 54%. “La caída del número de empresas gacela refleja que el deterioro de estos focos económicos de rápido crecimiento ya se estaba produciendo a finales de 2019, antes de la declaración de la pandemia”, alertan al tiempo que anticipan una caída “aún mayor” debido a la “enorme dificultad” que supondrá mantener ese ritmo de desarrollo como consecuencia de la crisis sanitaria.  

Antes de la propagación del SARS-CoV-2 a nivel mundial, las empresas de alto crecimiento se dispersaban en 175 CNAE diferentes de actividad, con bastante presencia de segmentos vinculados a construcción, logística y ocio. En concreto, el transporte de mercancías por carretera copa el grueso (10,8%), seguido de construcción de edificios residenciales (6,5%) y restaurantes (3,8%). Completan las diez primeras posiciones instalaciones eléctricas (3,3%), fabricación de carpintería metálica (2,9%), fontanería e instalaciones de sistemas de calefacción (2,7%), fabricación de estructuras metálicas (2,3%), construcción especializada (2,3%), programación informática (2,1%) y servicios técnicos de ingeniería (1,7%). Sin embargo, desde Insight View ven muy probable que esta fotografía sectorial experimente un profundo cambio a raíz de la crisis sanitaria.

La sociedad limitada es la fórmula jurídica por excelencia. Un 97,5% del total han optado por ella para su constitución, probablemente por el hecho de que requiere menor aportación de capital inicial en su creación. El resto son sociedad anónima, sociedad cooperativa y sociedad limitada laboral. Cabe destacar que, de las 480 gacelas corporativas existentes, la gran mayoría (398) es pequeña empresa y solamente 13 de ellas ha dado el salto a gran organización. 

En conjunto, el impacto económico que generan no es baladí. La suma de su facturación total supera los 2.800 millones de euros y generan más de 16.600 puestos de trabajo, especialmente en Madrid, que se erige como el principal clúster provincial de las gacelas. Más de una quinta parte de ellas se instalaba allí antes de enero de 2020. A mucha distancia destacan también las provincias de Barcelona (7,7%), Murcia (7,1%) o Valencia (6%). En cambio, el panorama es totalmente diferente en Burgos, Cuenca y Segovia, que no cuentan con ninguna compañía de alto crecimiento, así como tampoco en Ceuta y Melilla.

Al analizar por comunidades autónomas, la radiografía muestra una tendencia muy similar, con Madrid (21,5%), Andalucía (19,8%), Cataluña (12,3%) y Comunidad Valenciana (10%) a la cabeza. En el lado opuesto se sitúan Cantabria, Navarra y La Rioja, con 2,4 y 5 empresas gacela, respectivamente.